EL último ha sido el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo: “Si el PP dependiera de los extremos y de los independentistas, tendría que pedir la baja del partido”. Bueno, el PP depende del extremismo ultra de Vox en Madrid, Murcia y Andalucía y hay pocas dudas de que, de ser necesario, Feijóo pactaría también con ellos. Su partido va a meter a Abascal y los suyos en la Mesa del Congreso. Y sin bajas. Eso sí, no hay “independentistas”. De lo que se deduce que cuando dice “extremos” solo mira hacia un lado: el extremo al suyo.