Creo que ya va siendo hora de que empecemos a ser mayorcitos y nos demos cuenta de que actuamos, a veces, de manera irresponsable y que esto nos lleva a tener problemas. Por mucho que nos empecinemos en echarle la culpa de todo al Gobierno, como graciosamente hacen los italianos: “¿Llueve? ¡Maldito Gobierno!”, no es verdad. Esto lo digo a colación del caos que se vivió el pasado fin de semana en la AP-6 por el temporal de nieve. A pesar de que los meteorólogos avisaron dos días antes de que la cota de nieve bajaría hasta los 200 metros, y a pesar de que en los paneles de entrada hacia la AP-6 se recomendase la obligatoriedad de llevar cadenas, 3.000 conductores obviaron deliberadamente estos consejos y pusieron sus vidas y la de los familiares que iban con ellos en una gravísima situación de riesgo. Decía Séneca que cuando se está en medio de las adversidades, ya es tarde para ser cauto. Gracias a Dios contamos con los efectivos de la UME para que puedan socorrer a los que adolecen de ser unos incautos. De no ser por ellos, hoy las banderas de España estarían izadas a media asta. Desde la página de la OCU veo que animan a los afectados a reclamar. Yo cambiaría reclamar por reflexionar.