LA confirmación de que el recién finalizado 2015 ha sido el año en el que Euskadi ha superado la barrera de los tres millones de turistas -3.004.348 si se suman registros en hoteles, casas rurales, campings y apartamentos- y que además el ascenso del 9% en el número de pernoctaciones sitúa estas por encima de los seis millones es tanto como confirmar el exitoso posicionamiento de nuestro país como destino turístico y la relevancia en nuestra economía de un sector que se afianza ya cerca del 6% del PIB, aporta 3.900 millones de euros al mismo y da empleo a casi cien mil personas. Son cifras inimaginables hace apenas unos años y que permiten asegurar que la apuesta por el turismo como ámbito de oportunidad, que en nuestro país había sido, salvo excepciones notables, irrelevante cuando no anecdótica, ha cuajado más allá de coyunturas y ha logrado forjar una base fundamental de marca -Euskadi, Basque Country- ligada a determinados niveles de calidad sobre la que diversificarse y seguir creciendo. No en vano la diversidad, tan presente en nuestro paisaje como en nuestras actividades como sociedad, y la facilidad de acceso a ofertas bien dispares en un margen espacio-temporal muy asumible para el turista, permiten hacer de la diferencia que nos caracteriza como país, con su cultura, sus tradiciones, costumbres y realidades propias y específicas, también una de las características principales de nuestra oferta turística, irreproducible para otros. La amplia y tremendamente diversa presencia, por ejemplo, ayer en la apertura de Fitur, de localidades, asociaciones y entidades vascas que de una u otra forma contribuyen a impulsar el destino de Euskadi -en la más amplia comprensión del término “destino”- es prueba evidente de ello. Como lo es también la capacidad del sector turístico vasco para diversificar sus targets, especialmente en el ámbito internacional (que ya nos aporta cuatro de cada diez visitantes), en el que sin renegar de los nichos tradicionales de turistas -Francia, Alemania...- Euskadi se apresta a reforzar su presencia de modo ya inmediato en mercados de enorme potencial como Estados Unidos o los Países Escandinavos. Penetrar en ellos permitirá afianzar nuestra marca turística y nuestra imagen de país.
- Multimedia
- Servicios
- Participación