Lo viejo y lo anticuado
El osado y muy enérgico diputado vasco Gorka Maneiro decía hace unos días, al hilo de posibles acuerdos de su formación con el recién nacido Ciutadadanos-Euskadi, que UPyD no quería los votos añadidos de una posible alianza para defender ideales diferentes a los suyos, sino para seguir haciendo política contra “los partidos viejos y anticuados”. No han sido pocas las veces que ha agredido contra toda su oposición tildando de neandertales a todos, además de arremeter constantemente contra la antigualla del concierto económico vasco.
Quisiera transmitirle al señor Maneiro que no comprendo su utilización del adjetivo viejo como algo peyorativo. En realidad, si contamos los años de democracia en España, en la CAV solo serían viejos el PSOE y el PNV. El PP, la coalición Bildu y su propia formación no suman 35 años. Por otra parte, esa vejez de la que habla no ha impedido a los dos partidos dinosaurio de las tierras vascongadas ser, al menos hasta ahora, los principales partidos de la comunidad. Han estado en pleno vigor, como también el concierto económico, este último en el ojo de huracán nada más que por envidias vecinas y desconocimiento. Solo su formación, con un solo diputado por Araba (tierra foral per se) está en contra del mismo en Euskadi.
Me gustaría saber si el señor Maneiro lee a los clásicos, puesto que como son viejos, hoy en día tampoco tienen valor. Vieja es la Revolución francesa, pero aunque curiosamente UPyD dice basarse en ella, según la teoría maneiriana de lo viejo, no tendría ya valor. Me pregunto también si habrá escuchado a Mozart, a Vivaldi o a Chopin, alguna vez. Me pregunto si, como euskaldun que es, habrá valorado como tal la lengua que habla como la más antigua de Europa, hoy en día con más modernidad de la que podíamos prever hace diez años.
Y ya termino: ¿No es ya vieja la Constitución que tanto dice defender, aquella que ha envejecido en 35 años más que el PSOE en 140? ¿No son la monarquía y la Guardia Civil cosas viejas y anticuadas? Si no entiendo mal, según los magentas hay viejos y viejos: vejeces que le valen, y vejeces que le estorban. Las primeras son novedades, las segundas, dinosaurios.
Cierro la carta con la alusión a una frase de un amigo de Baroja, Juan de Icea, que por ser un clásico no habrá querido leer don Gorka, según la cual todo progresista de hoy puede ser el conservador del mañana, y todo tradicionalista del hoy pudo derivar del progresista del ayer. No se haga usted viejo a sus 40, compañero, y practique la eterna juventud de la Constitución del 78.