EL mapa es solo una excusa. Tan poco sólida y tan discutible como puede ser el definir los diferentes matices de un color. Porque si la artimaña para seguir negando a los ciudadanos de Nafarroa el acceso regulado a los diferentes canales de ETB (uno de ellos íntegramente en euskera, la lingua navarrorum) es la mayor o menor intensidad que se da en el mapa del tiempo a los límites de la CAV, de la Comunidad Foral, de Iparralde o de todos a la vez, o el grosor de las líneas que delimitan las fronteras terrestres entre unos territorios y otros, entonces hablamos de otra cosa. Hablamos de la obsesión durante años por parte de los sectores del navarrismo más recalcitrante de poner puertas al espectro mediático para impedir la captación de ETB en el territorio foral, más complicada todavía desde el apagón analógico. Pero a algún ideólogo de ese navarrismo le ha parecido ahora que ni los colores son muy nítidos ni las líneas lo bastante recias, así que han decidido romper el convenio firmado en 2009 por Miguel Sanz y Patxi López para la captación de la señal, un protocolo que, como todo lo concerniente a ETB, nunca llegó a entrar en vigor. No es cuestión de recordar los términos del documento ni quién incumplió más. Lo cierto es que unos porque les venía bien la demora y los otros, los socialistas entonces en la Lehendakaritza, porque no lo consideraron nunca una cuestión prioritaria, el asunto quedó en el limbo de las ondas. Ni la insistencia de los partidos de la oposición en el Parlamento foral en la anterior legislatura para regular la captación dio fruto. Así que casi 27 años después, Euskal Telebista sigue emitiendo de manera alegal en la Comunidad Foral; y cualquier iniciativa para su correcta captación es torpedeada de inmediato, como ocurrió recientemente con el repetidor financiado por EA. UPN y sus acólitos siguen aferrados al grito de "que vienen los nacionalistas", ignorando que los dos canales de ETB son seguidos por miles de navarros, que no consumen ideología, sino programas informativos, de entretenimiento, retransmisiones deportivas o programas de actualidad. Y porque, además, ofrece entre otras cosas una información meteorológica muy prestigiada, exhaustiva, amena y rigurosa. Aunque otros solo vean las líneas de los mapas.