PP Connection

LA asunción de la investigación del denominado caso Barcenas por Pablo Ruz, magistrado del Juzgado Central de Instrucción nº 5 de la Audiencia Nacional donde se tramitan las diligencias de la trama Gürtel, describe ya en expediente judicial la siempre intuida conexión entre la red de corrupción desarrollada en el entorno del Partido Popular y las acusaciones de financiación irregular de la formación o, lo que sería lo mismo, abonos irregulares de la actividad o gastos de sus principales cargos. Sin obviar la presunción de inocencia ni el hecho de que otros informes policiales sobre graves delitos, también algunos provenientes de la Unidad de Delincuencia Económica y Financiera (UDEF), han sido puestos en cuestión al carecer de base probatoria suficiente; no cabe ignorar tampoco que en este caso las coincidencias nominales y pecuniarias en al menos cuatro ocasiones entre la documentación incautada durante la investigación de la trama Gürtel y los papeles con presuntos apuntes contables del Partido Popular publicados en los medios de comunicación dan soporte a la ya anteriormente extendida sospecha de que, en el fondo, Bárcenas y Gürtel son resultantes del mismo entramado. En realidad, el propio juez Ruz lo considera así al asumir la investigación de los apuntes contables atribuidos al extesorero del PP porque "existe una vinculación temporal, cuantitativa y subjetiva que permite inferir una correlación entre ambas anotaciones". El hecho de que dichas coincidencias se enmarquen, además, en presuntas dobles facturaciones en elecciones gallegas de la formación que dirige ahora Mariano Rajoy, incidiría en apuntalar las notorias sospechas de financiación irregular cuya realidad y alcance, en cualquier caso, será el propio juez quien deberá determinar. De momento, la asunción de la doble vertiente de la investigación por Ruz, la propia personalidad y antecedentes profesionales del juez y la consiguiente paralización de las pesquisas que, en principio, venía desarrollando la Fiscalía Anticorrupción -dependiente de la Fiscalía General del Estado y, por tanto, del Gobierno del PP- sobre los denominados papeles de Bárcenas permite atisbar un recorrido que, en cualquier caso, el PP no logrará detener con querellas extemporáneas ni, mucho menos, con peticiones como las de su portavoz, Carlos Floriano, de limitar la libertad de información.