PARA obtener estos parámetros,se tienen querecoger datos y estos seobtienen bien por observacióndirecta (como, por ejemplo,cuando se hace un análisis de sangre)o bien preguntando (a unpaciente, la cantidad de cigarrillos,alcohol o bollería que consumea la semana). Es aquí dondenace la encuesta, una herramientaactual donde, a través de la pregunta,se obtiene el conocimientonecesario para saber la situaciónactual de las cosas y, a partir deahí, poder actuar en caso necesario.
Se dice que la encuestación es laciencia más discreta e indiscretaa la vez, ya que pretende conocerel mayor número de cosas preguntandoal menor número depersonas posibles. Esta herramientase ha convertido ya en algonatural de nuestras vidas y somoscapaces incluso de hacernospequeños análisis leyendo la opiniónde otros; por ejemplo, sobreel hotel al que queremos ir devacaciones.
Este fin de semana tenemos undiluvio de encuestas, en esta ocasiónelectorales. Mejor este diluvio,que por lo menos crea empleoy mueve la economía, que el diluviodel fin de semana pasado quedestruyó, además de vidas, pertenenciasde muchos de nuestrosvecinos.
Estos sondeos de opinión no sonmás que fotografías de la intenciónactual del voto utilizando,cada laboratorio sociológico, sus mejores fotógrafos y cámaras paraque esa foto sea realmente nítida.En esto se empeñan, sobre todo,las empresas privadas, ya quedependen de ello sus alubias; enlas encuestas publicadas por institutosgubernamentales, el objetivosuele ser algo diferente ya quesolo se juega el prestigio y, algunos,lo tienen por los suelos.
No obstante, y nome cansaré endecirlo, que nadie pretenda quelas encuestas, las fotografías, seancapaces de anticipar exactamentelo que dentro de meses, semanaso días va a ocurrir. Es como si alfotógrafo, al sacar una foto al Gorbeahoy, se le exigiera que la fotomuestre cómo va a estar el Gorbeaen enero. No puede ser y, además,es imposible.
Simplemente está ahí
Así son las encuestas electorales.No se trata de creer o no creer,nadie cree en una fotografía;simplemente está ahí. Hay personasque no les gusta y directamentelas echan a la basura, y hayotras que, aunque sepan que puedenser sacadas con algún filtropara obtener los verdes más vivos,las aprecian y son capaces inclusode atreverse a pronosticar elfuturo con el diagnostico delmomento analizado. Estos no solopasaran 3 minutos leyendo estosino que disfrutarán horas en estedemoscópico fin de semana.
* Sociólogo