Les juzgan por tratar de configurar un polo soberanista que ya existe, que ha recibido las bendiciones del Constitucional y que ha sido respaldado en las urnas hasta convertirlo en la segunda fuerza política vasca. La sucesión de acontecimientos hacen aún más caduco, y por lo tanto más injusto, este procedimiento que se sigue en la Audiencia Nacional contra los dirigentes de la izquierda abertzale. La intención de la Fiscalía y de los jueces instructores fue abortada el 22-M.
