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La unidad de destino... turístico

La política acordada por la Viceconsejería del Gobierno López y la Secretaría de Estado de Turismo tiene entre sus objetivos, si no de fin último, extender también a nivel internacional una falsa "normalidad" en la uniformización de Euskadi en España

EL acuerdo suscrito ayer entre Pilar Zorrilla, viceconsejera de Comercio y Turismo del Gobierno que preside Patxi López, y el secretario de Estado de Turismo del Gobierno español, Joan Mesquida, por el que ambas partes asumen al 50% el coste de la campaña promocional en Francia, Gran Bretaña y Alemania de la oferta turística vasca se antoja otro paso en una política que no tiene como objetivo exclusivo el fomento de Euskadi como destino. En primer lugar, la campaña se dirige a mercados en los que nuestro sector turístico ya tiene una presencia consolidada: Francia, Gran Bretaña y Alemania son, por ese orden, los tres países que más turistas envían a Euskadi con más del 16% del total de visitantes anuales. En segundo lugar, el acuerdo integra por primera vez al turismo vasco en la imagen de marca del turismo español y en la campaña que Turespaña desarrollará al mismo tiempo con destinos de otras Comunidades Autónomas, competencia directa del pujante sector vasco. En tercer lugar, da continuidad a un diseño global que ambos Ejecutivos empezaron a poner en práctica el pasado octubre con el acuerdo para relacionar el turismo vasco, sinónimo de calidad entre los touroperadores internacionales, con el de otras zonas del Estado que poseen características diferentes, y podría incluso explicar el aparente despropósito del lema Saboréala, utilizado profusamente por otras comunidades y ciudades del Estado español, en la campaña que la Viceconsejería de Turismo del Gobierno López presentó el pasado enero en Madrid. En cuarto lugar, el acuerdo suscrito ayer se visualizará en campañas conjuntas que unirán el término Euskadi -por el que se ha promocionado y dado a conocer nuestro país en el sector turístico como un producto diferenciado durante décadas- con el eslogan de Turespaña I need Spain (necesito España) creando una asociación de ideas nada subliminal. Y en quinto lugar, porque todas las acciones del Gobierno López en el sector turístico se han limitado a incluir a Euskadi en las campañas estatales y porque esa asociación de imágenes y conceptos entre Euskadi y España también ha sido la que ha impuesto el Gobierno López al equipo Euskaltel-Euskadi y la que ha intentado, aunque sin éxito, endosar a otros referentes deportivos vascos en competiciones internacionales. En otras palabras, la política acordada entre la Viceconsejería de Turismo y la Secretaría de Estado tiene entre sus objetivos, si no como fin último, el de extender a nivel internacional la idea de que Euskadi forma parte, como una región más, de la uniformidad del Estado español y, también dentro de éste, la de que el Gobierno López ha logrado alcanzar la normalización que los socialistas se empeñan en publicitar pese a que la realidad, y las encuestas, digan todo lo contrario.