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Modernidad al mejor precio

Citroën refuerza su posición en los segmentos más populares con las nuevas generaciones de C3 y C3 Aircross

Modernidad al mejor precioCedida

Una estampa que atrapa miradas, una confección convincente y una tarifa moderada. Son los tres ingredientes de la vieja pero infalible fórmula del éxito que todos los fabricantes intentan reproducir en sus modelos. Citroën la borda en sus dos creaciones más populares e imaginativas, el binomio C3 y C3 Aircross. El compacto polivalente y su declinación SUV se colocan en la vanguardia de sus respectivas categorías, acercando a la marca a la posición que le corresponde en el mercado.

Un cambio drástico en su discurso estético confiere a la firma francesa una dosis de notoriedad que siempre viene bien para recordar al público las cualidades menos evidentes de ambos productos. Además de sorprender y agradar a la vista, el C3 y el C3 Aircross acumulan méritos para entrar en las quinielas de muchos compradores potenciales. Por ejemplo, apuestan por las tecnologías de impulsión modernas sin desdeñar las motorizaciones clásicas. En consecuencia, abrazan la electrificación para ofrecer opciones de compra exclusivamente a batería y alternativas hibridadas, pero también hacen sitio en sus catálogos a unos propulsores de gasolina que siguen contando con un público fiel.

Como colofón, Citroën aplica a uno y otro modelo tarifas comedidas, compensando el desembolso con una política de equipamiento bastante generosa. La suma de todos estos motivos hace difícil encontrar en el mercado competidores que mejoren sus ofertas.

 

Un llamativo compacto con tres modos de impulsión

El C3 ofrece motorizaciones de gasolina (100 CV), híbrida (110 CV) y eléctrica (113 CV)

La cuarta entrega del C3 agita el mercado de los turismos pequeños y asequibles. Lo hace con una combinación de osadía estética, desparpajo dinámico y precio tentador que lo diferencia de casi todos los abundantes rivales. Su imagen desconcierta un poco debido a una altura algo mayor de la que se espera en un compacto de 4,02 metros de largo y 1,76 de ancho; su techo se alza a 1,58 m, elevación más propia de modelos de la categoría inmediatamente superior.

Ese rasgo singular confiere un plus de empaque, y también depara un apreciable desahogo a bordo que no brindan otros. Lo agradecen sus ocupantes, mejor cuatro que los cinco del aforo teórico. Las formas ligeramente cuadriculadas de su carrocería propician que el maletero a sus espaldas ofrezca 310 litros, volumen que solo supera un competidor directo.

En la concepción de la cabina llama la atención la supresión del cuadro de mandos convencional tras el volante. Lo sustituye una cenefa al pie del parabrisas que integra un head up display con datos de conducción esenciales. Las constantes vitales y las principales funciones del coche se vigilan y controlan a través de la pantalla táctil anclada en el centro del salpicadero. 

El C3, como el C3 Aircross, son beneficiarios del Citroën Advanced Comfort, desarrollo de suspensión que compatibiliza un correcto aplomo con un notable grado de comodidad en marcha. El de desenvoltura depende de la motorización elegida. El menú propone tres candidaturas con diferentes tecnologías.

Abre la oferta la versión de combustión Turbo 100 CV manual, animada por un bloque a gasolina de tres cilindros y 1,2 litros. Promete 160 km/h de punta y llega a 100 km/h en 10,6 segundos, exigiendo a cambio 5,6 litros de gasto medio y emitiendo al menos 126 g/km de CO2. Citroën la oferta a partir de 15.740 €.

La segunda posibilidad es la Hybrid 110 CV, derivada con electrificación parcial a 48 voltios que suma al motor tricilíndrico otro eléctrico de 29 CV y una pequeña batería. Consigue así mejorar las prestaciones. La velocidad no cambia, pero acorta el tiempo de reacción (acelera hasta 100 km/h en 9,8 segundos) y reduce el consumo (5 l) y las emisiones (114 g/km). Esta versión, con etiqueta ‘Eco’, se vende con transmisión automática y un acabado superior desde 20.200 €.

La marca de las espigas cierra el abanico con la variante 100% eléctrica ë-C3. Equipa un bloque de 83 kW (113 CV) y una batería de 43,8 kWh. Alcanza una velocidad máxima de 135 km/h, acelera hasta 100 en 11 segundos y certifica una autonomía de 315 km. Con el acabado más sencillo, reclama 22.590 €.   

La definición más modesta del C3 suma al equipamiento obligatorio: sensores de aparcamiento traseros, freno de estacionamiento eléctrico, elevalunas eléctricos delanteros, airbags (para conductor, pasajero, laterales delanteros para tórax y de cortina delanteros y traseros), aire acondicionado manual, suspensión Citroën Advanced Comfort, iluminación automática, lunas laterales tintadas, Head up display TFT, smartphone Station, firma luminosa LED y faros delanteros halógenos.

 

Un asequible SUV con identidad propia

El C3 Aircross ofrece una configuración de cabina con siete plazas

El C3 Aircross llama la atención por su original estampa y convence con una eficiente versión Hybrid (145 CV)

El C3 Aircross se ha convertido en un vistoso y versátil SUV. La llegada de la nueva generación el año pasado deparó un decisivo cambio tanto en el estilo como en el tamaño. Desde entonces luce una robusta y sofisticada carrocería, 23 centímetros más larga que antes. Además de fotogenia, el nuevo diseño aporta una buena dosis de practicidad.

Disponible hasta hace poco con motores de gasolina (100 CV) y eléctrico (113 CV), el modelo ensancha su horizonte comercial y cobra mayor interés al incluir en el menú una motorización microhíbrida de 48 V. Su rendimiento inicial de 136 CV se ve incrementado ahora hasta los 145, haciéndola aún más convincente que las otras dos en vigor. Coincidiendo con esa incorporación el C3 Aircross añade a su cartera de opciones una configuración de cabina con siete asientos para recalcar su talante familiar.

La transformación formal intensifica su poder de seducción de la nueva entrega, que también adquiere un poco más de credibilidad en su papel de sucedáneo de todoterreno para clientela activa. Por si fuera poco, el candidato asoma al mercado exigiendo un precio contenido.

En la etapa actual, el modelo se convierte en uno de esos coches que entran por los ojos y encajan en el bolsillo. El C3 Aircross se puede adquirir desde 18.790 €. Es el desembolso mínimo que exige la versión más asequible, impulsada por el motor 1.2 Turbo 100 de tres cilindros y vestida con el modesto acabado You, que ajusta el precio y el equipamiento.

Forman parte del mismo las ayudas a la conducción reglamentadas: Active Safety Brake con aviso de colisión frontal, asistentes de mantenimiento de carril y de arranque en pendiente, alerta de atención del conductor, información sobre límites de velocidad, controles de estabilidad y tracción, limitador de velocidad y control de crucero. Las dotaciones se completan con seis airbags, aire acondicionado manual, elevalunas delanteros, sensor de aparcamiento trasero, encendido automático de faros, suspensión Advanced Comfort con amortiguadores hidráulicos progresivos, llantas de chapa y poco más. Hay otros dos acabados por encima (Plus y Max), paulatinamente mejor provistos y más costosos.

Además de esta motorización, el C3 Aircross comparte con su hermano el C3 la eléctrica de 113 CV que, con la misma terminación inicial, reclama 25.280 € sin contar subvenciones. La autonomía (307 km) acusa el mayor peso y tamaño, por lo que se convierte en una propuesta para usuarios que realizan desplazamientos cortos o que tienen oportunidad de recargar el coche asiduamente. Citroën puede aprovechar en algún momento la posibilidad de implantar en el ë-C3 Aircross la combinación de bloque eléctrico de 136 CV y batería de 50 kWh; ganaría agilidad, pero no demasiado alcance, y quizá elevaría el precio.

Así las cosas, parece bastante claro que la motorización idónea para las características y el destino del C3 Aircross es la Hybrid. En especial si va a desempeñar cometidos familiares, entre los cuales suele entrar algún que otro viaje, misión para la cual las otras dos alternativas motrices están menos capacitadas. 

La versión Hybrid instala la fórmula de microhibridación a 48V empleada por varios modelos Citroën y de otras marcas del grupo Stellantis. Combina una variante específica del motor tricilíndrico 1.2 Pure Tech de gasolina con otro eléctrico de 29 CV asistido por una pequeña batería; se asocian con una caja de cambios automática. El bloque de combustión se encarga de impulsar el vehículo, recibiendo el apoyo puntual del eléctrico en momentos de máximo esfuerzo. Este motor auxiliar asume el arranque y la recuperación de energía en las deceleraciones; puede mover en solitario el coche en breves maniobras y en momentos puntuales de avance por inercia.

Aprovecha sus 145 CV para moverse a un máximo de 193 km/h, progresando hasta 100 en 8,8 segundos. Se conforma con 5,3 litros a los cien y expele 120 g/km de dióxido de carbono. Luce distintivo ‘Eco’. Adquirir un C3 Aircross Hybrid, que parte con acabado intermedio, requiere desembolsar al menos 24.890 €.