Citroën recupera posiciones en el mercado. Progresa en todos los segmentos del mismo, incluido el de los turismos, donde el nuevo C4 destaca sobreponiéndose al eclipse causado por la moda SUV y a la carencia de semiconductores. Este producto medio cerró 2021, su primer ejercicio completo, liderando su categoría. En lo que va de 2022 mantiene un ritmo de ventas notable, superando las 4.300 matriculaciones en el primer cuatrimestre; eso significa que uno de cada tres clientes de la marca de las espigas elige el C4.
El modelo también juega un rol protagonista en el emergente mercado de los automóviles 100% eléctricos. Esta modalidad de impulsión acumula desde enero nueve mil clientes, 500 de los cuales se han decantado por la propuesta de Citroën. En consecuencia, el ë-C4 asciende hasta la tercera posición de la división, convirtiéndose de paso en líder de ventas entre los turismos a pilas.
Ese medio millar de personas y empresas que optan por la versión a batería suponen más del 12% de los compradores del C4. No hay un turismo equiparable con tanto predicamento entre los partidarios de la electromovilidad. Otro dato curioso del C4 es que su clientela procede casi en la misma medida del canal profesional (44,2%) como del de particulares (46,9%).
En su estreno hace poco más de un año, el modelo llamó la atención por su diseño, tan original como transversal, capaz de fusionar rasgos propios de un turismo con facciones semejantes a las de un SUV. La combinación recibe, además, el toque deportivo que confiere una silueta con claras reminiscencias cupé.
El equipo encargado de definir la hechura también eligió un estilo interior depurado y tecnológico. En consecuencia, muestra un puesto de mandos digitalizado, provisto de una pantalla táctil multifunción de 25,4 cm. El C4 tiene a su disposición abundantes tecnologías de conectividad y asistencia a la conducción. Cuenta, asimismo, con los más modernos sistemas de protección.
Además brinda un singular compromiso entre aplomo y bienestar de marcha, característica que se ha convertido ya en una de las señas de identidad de la marca francesa. A tal fin incorpora un diseño de suspensiones que integra unos eficientes Amortiguadores Progresivos Hidráulicos.
Quien sopese la candidatura del C4 encuentra la oportunidad de decantarse por una de las tres acreditadas motorizaciones de combustión, o bien por la 100% eléctrica. Entre las primeras figuran dos creaciones gasolina Pure Tech 1.2 de tres cilindros, una con 100 CV y otra de 130; las acompaña la variante gasóleo 1.5 BlueHDi, cuyo bloque de cuatro cilindros procura 110 CV. Este abanico motriz térmico acredita una horquilla de consumo oficial WLTP entre 4,1 y 7,4 litros a los cien; las emisiones de dióxido de carbono fluctúan de 107 a 145 gramos por kilómetro.
La propuesta completamente eléctrica ofrece un rendimiento máximo de 100 kW, equivalente a 136 CV. Esa es la potencia correspondiente al modo de utilización Sport; se ve reducida a 109 CV en la modalidad de conducción Normal y a 82 en la Eco. El ë-C4 es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 150 km/h y puede progresar de 0 a 100 en 9,7 segundos.
Equipa una batería de 50 kWh, que promete una autonomía ideal de 351 km. El reabastecimiento de la misma en la red requiere 15 horas de inmovilización cuando se utiliza una toma doméstica, con corriente alterna a 230V y 16A. El fabricante indica que un punto de carga rápida a 100 kW permite reponer el 80% del contenido del acumulador en media hora de conexión. l