“He ido a tope, he apurado al máximo para ganar. Sabía que era muy importante”, manifestó Pecco Bagnaia, flamante vencedor del Gran Premio de Malasia. El italiano, que partía noveno, cumplió con su parte, pero también Fabio Quartararo, que arrancó duodécimo y terminó tercero para posponer la consecución del título de MotoGP a la última carrera del campeonato, Valencia, donde Bagnaia será campeón si suma dos puntos; es decir, Quartararo únicamente reeditará su corona en caso de ganar, lo que no consigue desde junio, y de que a la vez Pecco sea decimoquinto o peor.

Venció Bagnaia no sin tensión. Porque el único capaz de arrebatarle la primera posición fue Enea Bastianini, piloto satélite de Ducati y que el año próximo será compañero de equipo de Pecco aunque juguetón y revoltoso. En la undécima vuelta, La Bestia rebasó a Bagnaia y todos los pesos pesados de Ducati se echaron a temblar.

Gigi Dall’Igna, director general de la marca italiana, salió del garaje para debatir con los directores deportivos Paolo Ciabatti y Davide Tardozzi. Pese a que nunca se han admitido las órdenes de equipo en Ducati, se ejecutaron con mensaje cifrado. “Mapping 8”, le indicaron en el cuadro de mandos a Bastianini, que al igual que sucediera en Tailandia con Johann Zarco o en Australia con Marco Bezzecchi, enterró el hacha de guerra para dejar en paz a Bagnaia, para que el líder de Ducati recuperara la cabeza tres giros más tarde a fin de ganar por séptima vez este año y acariciar así el Mundial.

“Vi la pizarra en aquella vuelta, pero no tuvo ninguna importancia en mi carrera, solo que sabía que tenía que tener cuidado porque para Ducati es importante el título”, confesó Bastianini sobre el nombre de Pecco escrito en su pizarra. La Bestia deslizó además que “si fuera por mí, me gustaría atacarle, pero siempre con cuidado”. Renunció a la lucha y cerró la prueba en segunda posición, respirando en el cogote de Bagnaia para hacer ver que poseía potencial para disputar el triunfo. “Ha habido nervios, ha habido nervios”, confirmó Ciabatti. Benditos nervios por otra parte, ya que Ducati puede ganar los títulos de Pilotos, Constructores y Equipos. Pleno. 

Es la ventaja con la que ha contado Pecco durante la temporada. Más allá del potencial de su máquina, con ocho pilotos corriendo para Ducati, los aliados son mayoría en relación con Quartararo, que no se ha visto asistido jamás por ningún piloto de la errática Yamaha. Para encontrar al segundo piloto de la marca hay que desplazarse al decimonoveno peldaño del Mundial, donde aparece un Franco Morbidelli que presenta 36 puntos, a diferencia de los 235 de Fabio, que por su parte posee 23 menos que el líder.

Bagnaia se topó además con la fortuna de la caída de Jorge Martín cuando el madrileño lideraba escapado. Aunque a buen seguro, al ser otro miembro de Ducati, no hubiera complicado la vida al italiano. Cierto es que la caída benefició más a Quartararo, que al ser tercero prolongó la vida del campeonato. El francés tuvo que esmerarse para subir al cajón ante la manada de Ducatis. Bezzecchi, a la zaga de Quartararo, quiso dar el título Bagnaia, pero terminó cuarto, sin un adelantamiento que hubiera resultado decisivo.

En Cheste Bagnaia estará en disposición de lograr el segundo título para Ducati quince años después de que Casey Stoner inaugurara el casillero. “Trataré de hacer un fin de semana normal e inteligente, gestionarlo y entenderlo todo y si tengo posibilidades de ganar, lo haré”, declaró Pecco, que solo hallará rival en Quartararo después de que Aleix Espargaró perdiera sus opciones de campeón tras ser décimo. “Hicimos el ridículo en las últimas carreras”, confesó. Mientras, Marc Márquez rebajó la euforia de días atrás con una discreta séptima plaza. “No tenía la velocidad para estar con los líderes”, comentó..

Moto2

Tony Arbolino se impuso en el Gran Premio de Malasia de Moto2, con una solvencia impresionante, llegando a aventajar en más de 11 segundos al segundo clasificado, Alonso López. La categoría intermedia llegará a la última cita del calendario sin decidirse. En la lucha por el título, Augusto Fernández cobró ventaja gracias a la caída de Ai Ogura. El madrileño partirá en Cheste con una ventaja de 9,5 puntos sobre el piloto japonés.

Ogura cometió el error en la última vuelta, cuando trató de arrebatarle la victoria a Arbolino. El nipón perdió el control de su moto y terminó sobre el asfalto dejando vía libre a un Augusto Fernández que fue cuarto para recuperar el liderato del Mundial.

Moto3

John McPhee firmó su primera victoria de la temporada en Moto3, donde ha vivido dos años de sequía. Tras el piloto británico llegó su compañero en Husqvarna, Ayumu Sasaki, y Sergio García, que afianzó su segunda posición en el campeonato al aumentar su renta de los dos a los ocho puntos sobre Dennis Foggia, quien partió desde la pole e incluso llegó a alzarse líder de la carrera en Sepang, pero concluyó en la sexta posición. El campeón del mundo, Izan Guevara, finalizó en la duodécima plaza.