El derbi Santurtzi-Portugalete un lustro después
Reeditan en San Jorge un duelo vecinal que no tenía lugar desde 2019. Beñat, capitán del equipo morado, y el jarrillero Cortezón hablan del partido
San Jorge vestirá mañana sus mejores galas. El derbi entre el Santurtzi y el Portugalete regresa cinco temporadas después, con ese punto de motivación y movilización que genera este duelo vecinal entre dos entidades que distan a unos cientos de metros una de otra. Es un partido marcado en rojo para la matinal de este domingo (11.15 horas). Lo es por la rivalidad entre los dos clubes, por la gran asistencia que se espera –la más alta de la temporada en San Jorge– y por el chute que supondría coger los tres puntos. Es un derbi, además, que se ha hecho esperar en el tiempo. La última vez que se vieron las caras las dos escuadras de Ezkerraldea en recinto morado data del 29 de septiembre de 2019, encuentro saldado con victoria jarrillera por 1-3, triunfo que el Portu repitió en la cita de la segunda vuelta en La Florida (1-0). Al final de aquel curso, el conjunto gualdinegro ascendió a Segunda División B, el Santurtzi se mantuvo pero a la campa posterior descendió a División de Honor para retornar el pasado mayo de nuevo a la actual Tercera RFEF.
Del derbi de 2019, solo tres futbolistas repiten y los tres lo hacen en el Santurtzi. Se trata de Jon Arambarri, Álvaro Marroquín, en su segundo etapa como morado y que se perderá el duelo de mañana por sanción tras ver la roja la jornada pasada ante el Eibar C, y el capitán Beñat Hernández (Santurtzi, 21 de julio de 1992). El de Kabiezes, aunque a día de hoy reside en Mamariga, es una de las grandes referencias del colectivo de Miguel Romillo, que no conoce la victoria en las cinco jornadas disputadas –ocupa puestos de descenso–, y disfruta de su novena temporada consecutiva en el club de San Jorge. Jugó la última media hora del derbi de cinco año atrás, pero su presencia no sirvió para que su equipo sumara. “Son partidos bonitos de jugar y siempre son especiales. El derbi mueve mucha gente, el Portu tiene una gran masa social y el ambiente es excepcional. Es un partido que motiva, te reencuentras con amigos, vienen más familiares y se vive más intenso”, expresa Beñat, que reconoce que pese “a llevar casi una década en el Santurtzi, sigo motivado, disfrutando de cada partido”.
El capitán santurtziarra, que se define como un futbolista “al que le gusta abarcar mucho campo, coger caídas para abrir a bandas y que busca el área contraria”, asume que el Portugalete parte como favorito, pero que su equipo no se lo pondrá sencillo. “El Portu tiene mucho potencial, cuenta con grandes jugadores y genera ocasiones. Es un equipo con gente muy dinámica arriba, que sabe competir y con una plantilla hecha a medida para pelear por lo máximo, si bien nosotros también tenemos nuestras posibilidades. Somos un equipo recién ascendido, pero estamos compitiendo bien. Nos falta pulir detalles que nos han privado de ganar. Se nota el salto de categoría y tenemos que corregir esos matices”, subraya Beñat, quien pone el acento en el derbi que espera: “Creo que será un partido igualado. Jugamos en casa, el tipo de césped artificial de San Jorge nos puede favorecer un pelín, pero al margen de ello tenemos que salir a apretarles, conscientes de que ellos también empezarán fuertes, al mismo tiempo que debemos minimizar errores que nos han costado puntos”.
El efecto Cortezón
Ningún futbolista de la actual plantilla del Portugalete participó en derbi alguno de la campaña 2019-20, aunque el ariete Xabi Cortezón (Bilbao , 24 de marzo de 1993) sí tiene vasos comunicantes, ya que militó en el Santurtzi en la lejana campaña 2014-15, pero en la que tuvo poca presencia. “Era mi tercer año de senior. Toño Vadillo, el entrenador, jugaba con un 4-4-2, y coincidí con dos grandes delanteros, como Galder y Bonilla, para bien y para mal, y me tocaba salir de refresco. Fue un año muy bonito, un año de la leche, que no olvidaré”, rememora el delantero, que mañana regresa a San Jorge. “Será un domingo especial, la grada llena, viejos amigos… Sabemos que es un campo peculiar, al que tenemos que hacernos, en un derbi en el que habrá muchas disputas, segundas jugadas. Un derbi, en definitiva, en el que los dos equipos jugaremos muy intensos y que se llevará el que sepa gestionar mejor esos detalles”, declara el bilbaino, un nueve a la vieja usanza, “una referencia en el área contraria, que domina el juego aéreo, de espaldas, al primer toque y que me asocio bien con mis compañeros”.
Cortezón recaló el verano pasado en el Portugalete después de cerrar su etapa en el Barakaldo, con el que vivió dos históricos ascensos consecutivos a Segunda RFEF y Primera RFEF y con el que firmó buenos números a nivel personal. Sin embargo, este maisu de Educación Física tuvo que declinar su renovación con el club de Lasesarre por “la imposibilidad de compaginarlo con mi trabajo, ya que estamos hablando de una categoría cuasi profesional y con entrenamientos por la mañana”. “Te queda esa duda de que si hubiera seguido, de haber conocido la Primera RFEF… Si me hubiera pillado hace cinco años…”, afirma el delantero, que no se considera un fichaje estrella de la entidad jarrillera, aspirante al ascenso a Segunda RFEF, debido a su pasado reciente en el Barakaldo, con el que jugó 60 partidos y marcó 17 goles: “Soy uno más en un vestuario increíble, en el que el grupo humano es lo más importante. No me exigen goles, lo importante es el equipo y yo intento ayudar en todo lo que pueda, si es a base goles, mejor. La presión en el Portu es similar a la del Barakaldo, aunque es cierto que en esos dos años en el Barakaldo todo fueron momentos positivos y ninguno malo”.