Gernika1
R. M. Castilla1
GERNIKA: Altamira, Kevin, Pérez, Carracedo, A. Larruzea, Oti, Salutregi (Min. 85, Franco), Lander, G. Larruzea (Min. 63, Santamaría), Entziondo (Min. 69, Aimar) y Etxabe.
REAL MADRID CASTILLA: Abad, Dani, León, Héctor, Tejero, Llorente, Muñoz, Álvaro (Min. 66, Mayoral), Enzo Zidane, Odegaard y Narváez (Min. 73, Mariano).
Goles: 1-0: Min. 36; Lander. 1-1: Min. 78; Mariano.
Árbitro: Óscar Herrero. Amonestó a los locales Pérez, Kevin y Lander; y a los visitantes Narváez, León, Héctor y Tejero..
Incidencias: Unos 1.200 aficionados en Urbieta.
gernika - Las dianas de Lander y Mariano, ambas de vaselina, propiciaron el reparto de puntos entre Gernika y Real Madrid Castilla. Es el sexto empate consecutivo para los forales, que durante gran parte del partido tenía olor a triunfo, ya que controlaban tanto juego como marcador. Aún así, la entrada al campo, en el minuto 73, del goleador visitante cambió la cara a los de Zidane, que hasta entonces apenas habían chutado pero en el tramo final pudieron incluso golear.
La presión gernikarra, con un Lander más adelantado de lo habitual, asfixiaba a un Castilla que no conseguía pasar el medio campo con el balón jugado. El Gernika, más intenso y con más criterio, comenzó a inquietar el área blanca según avanzaban los minutos. El primer tiro entre los tres palos se produjo cuando el reloj se acercaba a la media hora. Fue de Entziondo, en una falta que detuvo sin necesidad de tirarse el espigado portero madridista.
Fue el aviso al gol de Lander, que aprovechó una peinada de Gorka Larruzea para encarar el camino a puerta como una locomotora y picar el cuero por encima de Abad, a media salida. Es el quinto gol del capitán en lo que va de liga, está de dulce. El Gernika siguió inquietando a base de centros laterales buscando los remates de Etxabe, que fue un quebradero de cabeza para la zaga rival, pero faltó fortuna. Enzo, un minuto antes del descanso y desde lejos, realizó el primer tiro entre palos de los visitantes.
El segundo acto tuvo guion distinto. A los locales les empezó a pasar factura el esfuerzo y los merengues se adueñaron del balón, aunque no encontraban grietas. Hasta que salieron Mayoral y Mariano, y echaron la puerta abajo. Una jugada del primero acabó con golazo del segundo, que cazó adelantado a Altamira. Tras el 1-1, gozaron de cuatro ocasiones claras, como un tiro de Odegaard al palo.