Bilbao. Tras un verano marcado por la ausencia de fichajes y por la inestabilidad administrativa creada por el anuncio de venta del jeque Al Thani, el Málaga debuta en la Champions League ante el Panathinaikos. El club andaluz espera que la clasificación en la previa de la Liga de Campeones sirva para aliviar sus tensiones económicas, ya que ingresarían 8,5 millones de euros vitales para su supervivencia.
Hace dos años el jeque catarí Al Thani compró el Málaga con la intención de convertirlo en una de las potencias del fútbol mundial. Después de un año de altibajos, en el verano de la temporada 2011-12 el multimillonario propietario decidió hacer una fuerte inversión e incorporó a jugadores de primer nivel como Cazorla, Van Nistelrooy, Buonanotte, Joaquín, Isco, Monreal, Toulalan, Mathijsen o Sergio Sánchez.
En el plano deportivo, la temporada fue estupenda. El Málaga realizó un gran año y consiguió clasificarse por primera vez en su historia para la Champions League. Sin embargo, los problemas dentro de la institución comenzaron muy pronto. En abril, Fernando Hierro, director general, dimitió por razones estructurales. Además llegaron las denuncias por impago de fichajes desde Osasuna, Villarreal y River Plate.
Por si esto fuera poco, Hacienda reclamó 18 millones de euros al Málaga, embargó los 15 que recibió del traspaso de Cazorla y dejó al club en una situación crítica que obligará a los malacitanos a firmar rápidamente un convenio con Hacienda.
Y con el verano llegó el gran bombazo. Al Thani decidió poner en venta el club y dejar de invertir en él. Esta situación ha hecho que el Málaga no haya podido fichar a ningún jugador durante la pretemporada. Mientras el jeque sigue sin encontrar comprador, el club andaluz ve como se queda sin los jugadores que le ayudaron a lograr su sueño europeo. Además del mencionado traspaso de Cazorla, el máximo goleador de la temporada pasada, Rondón, marchó hacia el Rubin Kazan. En total, doce jugadores han salido del Malaga y no se descarta que sean los únicos que abandonen el club antes del próximo día 31.
Con todo este caos, los jugadores y el cuerpo técnico trabajan con normalidad, a pesar de los salarios que todavía les adeudan. El Malaga afronta la previa ante el Panathinaikos como el partido que les puede dar la salvación. En caso de clasificarse para la fase de grupos de la Champions League, el club malacitano ingresaría 8,5 millones fijos y lo convertiría en un club más apetecible para posibles inversores.
"Cuando nos clasificamos todos esperábamos llegar de una forma distinta, pero llegamos así y con eso vamos a disputarla. La realidad existe, pero no queremos buscar ninguna excusa", afirmó Pellegrini en rueda de prensa.
Enfrente tendrán a un viejo conocido, el entrenador Jesualdo Ferreira. El portugués fue el primer técnico que contrató Al Thani para su empresa. Sin embargo, no llegó a cuajar y cuando solo habían transcurrido nueve partidos de la Liga 2010-11 fue sustituido por Pellegrini. El Panathinaikos llega a La Rosaleda en condiciones similares a las que vive el Málaga, inmersos también en problemas financieros.
Jóvenes esperanzas Ante la marcha de las grandes estrellas, Pellegrini ha decidido apostar por los jóvenes y ha convocado a Fabrice, que se convirtió en el goleador más joven de Primera División, Recio, Juanmi y Portillo. Ellos son la clave de la reconstrucción de un Malaga que necesita ser de Champions.