Un minuto fatídico

MIRANDÉS: Cecilio, Iñaki, César, Raúl, Antxon (Min. 72, José Ángel), Roberto, Alain (Min. 62, Mikel), Aritz (Min. 54, Ander), Pablo, Mikel y Álvaro.

BILBAO ATHLETIC: Serantes, Ramalho (Min. 36, Arnáez), Galán, Etxebarria, Albizua, Morán (Min. 46, Eraso), Eizmendi, (Min. 76, Guillermo), Peña, Yurrebaso. Ruiz de Galarreta e Ibai.

Goles: 1-0: Min. 59; Pablo. 2-0: Min. 60; Pablo.

Árbitro: Víctor Ríos. Amonestó a Raúl, Aritz, Pablo, Ander, José Ángel, Etxebarria, Morán y Eraso. Expulsó por doble amarilla en el minuto 86 a Ruiz de Galarreta.

Incidencias: Municipal de Anduva. 3.459 espectadores.

BILBAO. El Bilbao Athletic visitaba Anduva con el deseo de encarmarse a lo más alto de la tabla pero el Mirandés demostró por qué la pasada temporada se quedó a solo unos minutos de ascender a la Liga Adelante, cuando el Guadalajara de Carlos Terrazas les aguó la fiesta. Eso sí, fue el de ayer un minuto fatídico el que chafó las esperanzas de los cachorros, el que osciló entre el 59 y el 60 y en el que el local Pablo se erigió en héroe al certificar los dos goles del conjunto castellano-leonés, líder en solitario al frente de la clasificación con tres puntos de ventaja sobre la revelación de la categoría, el Amorebieta.

En la primera parte Albisua respondió pronto a una buena ocasión del local Iñaki cuando el partido trataba aún de asentarse, aunque la oportunidad más clara de los rojiblancos llegó en el minuto 32 cuando Ibai lanzó una falta. Uno y otro equipo se manejaban bien aunque sin poner en grandes apuros a los guardametas. Poco después fue Pablo quien avisó de sus intenciones al conjunto de Ziganda, si bien Raúl García gozó de una opción mayor en el minuto 40 para poner al Mirandés por delante en un cabezazo que sin embargo se marchó alto por muy poco.

En la reanudación el Bilbao Athletic salió con más brío y deseo de dar un golpe encima de la mesa e incluso el colegiado le privó de una jugada que acabó en la red pero que acabó anulándola. El Mirandés respondió de forma inmejorable. Más bien lo hizo Pablo. En una acción individual con un disparo desde dentro del área rubricó el 1-0 y cuando el público todavía lo festejaba, volvió a recostar el balón en su bota para sentenciar prácticamente la contienda en otra jugada personal de gran mérito. Como si el filial estara pensando en lo que había sucedido segundos antes, vio cómo se esfumaban sus ilusiones y todos esos ímpetus con que saltó al terreno de juego. Y es que luego los vizcainos no fueron capaces de crear peligro suficiente como para acortar distancias y meter el miedo en el cuerpo a los de Miranda y, para colmo de males, Ruiz de Galarreta fue expulsado por doble amarilla en la recta final de un encuentro que ratificó las aspiraciones de ascenso de los castellanos. Ocupando la cuarta plaza, los cachorros recibirán en Lezama la próxima jornada a la Gimnástica, que precisamente ayer le igualó en la tabla con 13 puntos, situados ambos en esa zona de play-off.