barcelona. Los presidentes del Espanyol y del Barcelona, Sánchez Llibre y Sandro Rosell, respectivamente, sellarán la paz entre ambas directivas, tras unas relaciones deterioradas en el mandato de Joan Laporta al frente del club azulgrana, en la comida que celebrará mañana la plana mayor de ambos clubes en el palco presidencial de Cornellá-El Prat poco antes del debi.

Las batallas dialécticas entre el presidente Daniel Sánchez Llibre y el ex presidente azulgrana Joan Laporta eran constantes. El motivo de las malas relaciones fue la negativa del Barcelona a vender al delantero Javier Saviola en agosto de 2005. Desde entonces, Llibre nunca ha acudido al palco del Camp Nou.

Por otro lado, el protagonismo de los jugadores canteranos será el denominador común en el Espanyol-Barcelona de mañana, pues en el caso azulgrana los jugadores de casa han acaparado más del 62% de los minutos disputados en Liga, mientras que en el conjunto blanquiazul la participación llegó al 40%.

Desde que Pep Guardiola y Mauricio Pochettino se hicieron cargo de Barça y Espanyol, ambos equipos se definen por su apuesta por la cantera. Más de la mitad de los jugadores utilizados por cada bando en el presente campeonato proceden de la base. Y en ambos casos estos futbolistas componen la columna vertebral del equipo, sobre todo en el caso de los azulgranas.

La base del Barça de Guardiola son jugadores surgidos de la cantera, Pochettino, por su parte, sigue confiando ciegamente en los nuevos talentos del Espanyol B, actualmente en Tercera División. El delantero Álvaro Vázquez es el último ejemplo. Ha dado entrada a 27 futbolistas diferentes, catorce de ellos con origen en las categorías inferiores pericas.