El pleno del Parlamento Europeo ha respaldado este martes que se defienda el fin a los subsidios a los combustibles fósiles en 2025 en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima (COP28) que se celebra en Dubái entre el 8 y el 12 de diciembre.

Con 462 votos a favor, 134 en contra y 30 abstenciones, los eurodiputados han aprobado sus recomendaciones para los objetivos estratégicos que la UE debe defender en la COP28, encargada de hacer el primer balance mundial en el marco del Acuerdo de París.

La resolución, que constituye el mandato de la delegación del Parlamento Europeo, pide que se ponga fin a todas las subvenciones directas e indirectas a los combustibles fósiles a escala nacional, de la UE y mundial, "lo antes posible y a más tardar en 2025".

La Eurocámara también ha apoyado el objetivo mundial de triplicar el uso de energías renovables y duplicar la eficiencia energética en 2030, junto con una eliminación gradual tangible de los combustibles fósiles lo antes posible, y la meta de detener todas las nuevas inversiones en extracción de combustibles fósiles.

El texto insta a todos los países a reforzar sus compromisos climáticos y contribuir de manera equitativa a aumentar la financiación internacional para el clima al tiempo que hace hincapié en la importancia de proteger, conservar y restaurar la biodiversidad y defiende una reducción significativa del impacto climático y las emisiones del metano y sectores como el transporte marítimo internacional y la aviación, la agricultura y la defensa.

Reducir un 90% las emisiones de camiones y autobuses para 2040

Por otra parte, el pleno del Parlamento Europeo ha aprobado también este martes su posición sobre la reforma para reducir las emisiones de CO2 de los vehículos pesados nuevos, incluidos autobuses, camiones y remolques, lo que incluye la ambición de reducir un 90% las emisiones de camiones y autobuses en el horizonte de 2040.

De este modo, el mandato de los eurodiputados, aprobado en Estrasburgo (Francia) con 445 votos a favor, 152 en contra y 30 abstenciones, aboga por objetivos claros de reducción de emisiones contaminantes para autobuses y para camiones mediados y pesados, incluidos los de tipo profesional como camiones de basura y hormigoneras.

Para ello, validan la senda propuesta por la Comisión Europea con objetivos intermedios de reducción del 45% durante el período 2030-2034 y del 65 % para 2035-2039, hasta llegar al 90 % en 2040 (con respecto a los niveles de 2019).

Los eurodiputados respaldan también la propuesta comunitaria de permitir exclusivamente el registro de autobuses urbanos nuevos de cero emisiones a partir de 2030 pero proponen una exención temporal (hasta 2035) para los autobuses urbanos alimentados por biometano, bajo estrictas condiciones.