El Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales, Osalan, ha abierto una investigación sobre el proceso de desamiantado de las naves 7, 8 y 9 de CAF al admitir que han existido fallos. Su directora general, Lourdes Iscar, ha admitido que “algo ha fallado” y ha avanzado que en la actualidad se analiza si “falló el plan de trabajo, la ejecución del plan o si este plan no era el adecuado” para esta circunstancia, en la que trabajadores de la nave 8 del fabricante ferroviario guipuzcoano estuvieron expuestos al amianto durante cuatro días.

Acompañada por la viceconsejera vasca de Empleo, Elena Pérez Barredo, la directora general de Osalan ha comparecido ante la comisión de Trabajo del Parlamento Vasco a iniciativa de Elkarrekin Podemos para dar explicaciones acerca de la retirada de amianto de varias naves de CAF en un proceso que se ha demorado sobre lo previsto y que en la actualidad está en vigor sin que los trabajadores puedan acceder a sus puestos por precaución. Iscar ha explicado que el fabricante ferroviario con sede en Beasain realiza periódicamente labores de desamiantado y, dentro de esta práctica, presentó a Osalan un plan que fue aprobado el 16 de junio para iniciar un proceso en época estival.

Tras más de un mes, los trabajadores de CAF todavía no pueden acceder la nave

El 25 de agosto Osalan recibió una llamada del delegado de prevención de CAF en la que trasladó la preocupación de los trabajadores de la nave 8 al observar polvo en el ambiente. Ese mismo 25 de agosto, según ha remarcado Lourdes Iscar, Osalan contactó con la empresa quien le señaló que los trabajos de desamiantado se habían prolongado hasta el 18 de agosto porque una granizada había dañado un falso techo y los cascotes habían caído generando daños en los plásticos de recubrimiento, lo que exigió un refuerzo en la limpieza.

Reanudación de actividad

Según su relato, el 21 de agosto realizaron una medida ambiental de los niveles de amianto que superó los límites. Dos días después la repitieron y en esta ocasión se volvió a los parámetros normales, lo que volvió a ocurrir el día siguiente por lo que CAF decidió retomar la actividad en esta nave el 25 de agosto. Ese mismo día, Osalan contactó con el delegado de prevención para trasladarle esta información y se procedió a una visita visual con responsables de la empresa ferroviaria y de los trabajadores.

Iscar ha señalado que Osalan pidió a CAF información sobre las nuevas medidas previstas adoptar que recibió el 28 de agosto. Un día después, sin embargo, la compañía de Beasain llama al Instituto Vasco de Salud y Seguridad Laborales para transmitir que algunas de las medidas personales, aquellas que no se aplican a las instalaciones sino a los propios trabajadores, habían dado niveles superiores a los permitidos en amianto, por lo que decidieron cerrar la nave. En esta situación, Osalan exige a CAF un nuevo plan e incorpora nuevas empresas acreditadas para llevar a cabo procesos de desamiantado, con la intención de que cada una se ocupe de naves diferentes.

El 1 de septiembre responsables de Osalan y de la Inspección de Trabajo acudieron a CAF, donde se entrevistaron con representantes de la empresa y los delegados de prevención. Cuatro días después, la vicenconsejería de Trabajo citó al comité de empresa a quien presentó la nueva estrategia de muestreo para demostrar que la zona está descontaminada. El 12 de septiembre Osalan vuelve a CAF y al día siguiente recibe los datos sobre las mediciones personales. Con esta información, Loudes Iscar ha indicado que se procedió a aprobar los anexos al nuevo plan que contemplaba limpieza de taquillas y personas trabajadoras el 14 de septiembre.

El relato prosigue el 19 de septiembre, cuando la empresa responsable del desamiantado presenta su plan de descontaminación de baldas y carros. Dos días después se procede a realizar unas pruebas con ventiladores, para simular la presencia de personas dentro de la nave, que dan unos niveles adecuados a la ley. El 22 del mismo mes CAF presenta un listado de las subcontratas para que se apliquen las mediciones a sus trabajadores el mismo día en que el delegado de prevención pide información sobre la seguridad de la salud de los operarios que vayan a trabajar en la nave 8. El 23 de septiembre CAF decide retrasar la apertura de esta nave y el 26 procede a realizar nuevas mediciones, además de ampliarse este plan a las naves 7 y 9, contiguas a la afectada.

Reunión con los trabajadores

El pasado lunes, 2 de octubre, se celebró una reunión con el comité de seguridad de CAF al que le presentan las mediciones ambientales que son aceptadas. No lo fueron, en cambio, las correspondientes al 26 de septiembre por no estar presente una representación de los trabajadores, por lo que se repitieron ayer martes, tal y como ha explicado la directora general de Osalan. La viceconsejera vasca de Empleo ha intervenido también para explicar que la Inspección de Trabajo conoció el caso el 31 de agosto por una comunicación de Osalan y, al día siguiente, visitó las instalaciones. El 6 de septiembre recibieron la denuncia del comité de empresa de CAF.

Elena Pérez Barreda ha añadido que en la actualidad se encuentran investigando las razones por las que los trabajadores de la nave 8 realizaron sus labores entre el 21 y el 25 de agosto expuestos al amianto y analizando cuáles son las acciones pertinentes para que la reentrada al trabajo se realice con las debidas garantías. “Lo que ha fallado es prevenir antes de curar”, ha considerado