Las pensiones han subido un 2,5 % en este año 2022, aunque al parecer esto no es suficiente para la población vasca que opta cada vez en mayor medida por adherirse a un plan de pensiones complementario. Un 29 % de los trabajadores vascos así lo hacen, siendo la población ocupada guipuzcoana la que más opta por esta opción.

El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Gobierno presentó novedades relativas a las pensiones en 2022.

Según estas novedades, las pensiones han subido un 2,5 %, valor que corresponde al Índice de Precio de Consumo (IPC) medio entre diciembre de 2020 y noviembre de 2021, ya que las pensiones contributivas, incluidas las pensiones mínimas, se revalorizarán siempre el 1 de enero de cada año de acuerdo con la inflación media del ejercicio anterior. 

Sin embargo, esta subida del 2,5 % parece no ser suficiente para casi el 30 % de la población ocupada vasca que decide adherirse a un plan de pensiones complementario.

SISTEMA MIXTO

Para complementar el capital de cara a la jubilación y mantener el nivel de ingresos previo al momento de retiro, existen otros dos pilares, al margen del pilar de pensiones público o estatal, que complementan a este sistema pero no lo sustituyen, son voluntarios, su gestión es privada y se basan en un sistema de capitalización y no de reparto (mediante sus aportaciones o contribuciones, cada trabajador construye su propia pensión).

Estos pilares son los fondos de pensiones de empleo y los planes de pensiones individuales

Los primeros están organizados por las entidades para sus trabajadores en los que las aportaciones pueden venir de la empresa o también de forma combinada entre la empresa y el trabajador. 

Los segundos se basan en la contratación del ciudadano de instrumentos como los planes o fondos de pensiones con aseguradoras, bancos, mutualidades o compañías gestoras de fondos de pensiones.

Según cifras del Observatorio de la Previsión Social Complementaria del País Vasco, en el año 2021, 71 Entidades de Previsión Social Complementaria (EPSV) de Euskadi, instrumentos privados que complementan las pensiones públicas en nuestro territorio, contaban con planes de previsión. Además, se sumaba un total de 841.173 personas asociadas, de las cuales el 49,9 % contaba con planes de empleo y un 55,1 % se atenía a un plan individual.

PENSIONES COMPLEMENTARIAS

La cifra de personas socias y beneficiarias (sin duplicidades) ascendió en 2021 a 841.173 y 16.692 y el volumen de las aportaciones superó en un 30 % el de las prestaciones abonadas, dedicándose 953 millones de euros a las primeras y 731 millones a las prestaciones.

El patrimonio de las EPSV representó el 38,1 % del PIB vasco en 2021.

Centrando la atención en los sistemas de empleo, el importe medio de renta cobrado en EPSV de empleo se sitúa en los 766 euros. Además, en el total de la comunidad autónoma el 29 % de los trabajadores cuenta con una EPSV de empleo, pero con diferencias según Territorio Histórico, manteniendo Gipuzkoa una enorme ventaja.

La población ocupada de Gipuzkoa es la que más se adhiere a este tipo de planes siendo un 54 % el que lo hace. Por su parte, en Araba un 19 % de los trabajadores cuentan con una EPSV de empleo y en Bizkaia solo es el 15 % de la población ocupada la que busca un plan complementario.

Además, el volumen de aportaciones a estos sistemas de empleo es inferior al de las prestaciones (siendo 367,3 y 460,2 millones de euros, respectivamente).

LAS PENSIONES MEDIAS MÁS ALTAS Y BAJAS DE EUSKADI

Las más elevadas están en Bizkaia aunque es Araba la que sitúa su media mensual como la más alta

En Euskadi más de 568.316 personas cobran algún tipo de pensión contributiva, según los últimos datos ofrecidos en abril por la Seguridad Social. La media de estas pensiones se eleva hasta los 1.348,29 euros al mes frente a los 1.087,48 de la estatal, con una diferencia de algo menos de 50 euros entre el territorio con el registro más alto (Araba, con 1.369,58 euros) y el de la pensión media más baja (Gipuzkoa, con 1.320,96). En medio queda Bizkaia con 1.360,30 euros.

No obstante, las medias de pensiones más elevadas se encuentran en municipios de Bizkaia y las más bajas en Araba.

Es Bizkaia el territorio donde más municipios superan la barrera de los 1.500 euros de media al mes y la localidad de Getxo es la única de Euskadi que supera los 1.600 euros. Sin embargo, manchan sus datos varios municipios donde la media no llega a los mil euros, entre ellos Carranza y Arakaldo.

En Araba la mejor media se encuentra en los 1.485 euros en el municipio de Zigoitia, seguido muy de cerca por Artzienaga (con 1.464 euros) y Llodio (con 1.461 euros). Sin embargo, las pensiones más bajas no llegan siquiera a los 800 euros, las medias más bajas de todo Euskadi, como ocurre en los casos de Elvilar y Baños de Ebro, ambas con 707 euros, seguidos de varios municipios más como Navaridas, Valle de Arana o Samaniego que tampoco llegan a tal cantidad.

Por su parte, en Gipuzkoa solo una localidad supera los 1.500 euros de media, Olaberria, con 1.535 euros al mes, aunque son varias localidades más las que superan los 1.400 euros de media, entre las que destacan Beasain, Legazpi y Ordizia, e incluso las más bajas siguen superando los 1.000 euros de media en Errezil, Beizama y Aretxabaleta. 

La clasificación varía según donde se ponga el foco. En lo relativo a las pensiones de jubilación, Bizkaia tiene la media más alta con 1.496 euros, Araba se sitúa en segunda posición con 1.480 euros y Gipuzkoa queda la tercera con 1.415 euros mensuales.

Las pensiones de viudedad y orfandad sitúan a Araba en primer lugar con 981 euros, Bizkaia en segundo con 919 y Gipuzkoa, de nuevo, sería la última con 881 euros.