En un contexto gobernado con mano de hierro por las restricciones de la pandemia, Euskadi recuperó el año pasado su posición como comunidad con menos paro del Estado. La Encuesta de Población Activa (EPA) publicada el jueves por el INE ofrece una foto general del impacto del covid en el mercado laboral. El paro creció en todas las comunidades, menos Extremadura, Murcia y Galicia, pero la economía vasca resistió mejor que la media.

La tasa de paro de la CAV se situó en el 9,96%, por debajo de la barrera psicológica del 10% y muy lejos del 16,13% del conjunto del Estado. El porcentaje de paro vasco que arroja la EPA es incluso más bajo que el que señaló la semana pasada Eustat en su encuesta (11,2%).

La encuesta del INE refleja una notable mejoría de la CAV en el último trimestre. Todo lo contrario que lo que ha ocurrido en Nafarroa, que cede de este modo la primera posición en el ránking de comunidades con menos desempleo. En el balance del conjunto del ejercicio, la CAV cerró 2020 con 920.100 personas ocupadas, lo que supone 13.200 menos que al término de 2019 (-1,41%), y 101.800 personas desempleadas, 8.500 más que un año antes (9,09%).

La evolución en el conjunto del Estado fue más negativa en ambos apartados. El mercado laboral español registró en 2020 una subida del paro de 527.900 personas, lo que supone un 16,5% más, y un retroceso de la ocupación de 622.600 trabajadores (-3,1%). Son en ambos casos los peores datos anuales de la EPA desde el año 2012.

La clave del mejor comportamiento de Euskadi hay que buscarla en su perfil industrial. El sector manufacturero ha aguantado mejor que el de los servicios, donde la hostelería y el comercio han sufrido el mayor impacto de las restricciones. De modo que el paro ha crecido en las fábricas vascas de forma más limitada (3,4%), pero se ha desbocado en el sector terciario (19,6%). La regulación temporal de empleo ha sido en cualquier caso la red que ha evitado que la lista del desempleo haya avanzado más.

Por Territorios, los ocupados en Araba se sitúan en 135.800 con una tasa de actividad del 55,11%, en Bizkaia a 466.000 (54,66%) y en Gipuzkoa a 318.300 (57,04%).

Los parados del territorio alavés fueron 15.100 y la tasa de paro se elevó a 9,99%, en Bizkaia fueron 62.700 y la tasa de paro es la más alta, 11,86% y en Gipuzkoa con 24.000 desempleados, su tasa es la menor, 7,02%.

Los sindicatos piden gasto público

Tras conocerse los datos, los sindicatos reclamaron mayor inversión pública y un cambio de las políticas económicas y laborales para hacer frente a la destrucción provocada por la pandemia del covid-19.

Tras remarcar que el aumento del paro afectó en mayor medida a las mujeres y al sector servicios, advirtieron de que estos malos datos podrían empeorar por la tercera ola de contagios y además la aplicación de los ERTE oculta estadísticamente parte de la destrucción de empleo.

ELA señaló que en este contexto de incertidumbre, los trabajadores necesitan medidas por parte de las administraciones como “otras políticas de empleo que cambien el modelo productivo y creen y consoliden empleo en condiciones dignas”.

LAB indicó que solucionar el problema del paro, especialmente el de los jóvenes y la temporalidad, “requiere ir más allá de la derogación de las últimas reformas”, de forma que los gobiernos “asuman un compromiso serio con la inserción laboral de las generaciones más jóvenes y limiten el uso de la contratación temporal solo para cubrir actividades temporales o tareas eventuales”.

Comisiones Obreras apuntó que la EPA muestra un “frenazo” en el cuarto trimestre y la actual tercera ola “no hace presagiar una recuperación rápida”. CCOO añadió que en esta situación se demuestra el valor de los acuerdos conseguidos en las mesas de diálogo social en España y Euskadi.