El coronavirus no hará descarrilar este año la actividad de la división Converters and Automation -conversión y automatización eléctrica- de Ingeteam, el área con mayor implantación en Bizkaia de la compañía vasca y de la que depende directamente la fábrica de Ortuella, inaugurada hace apenas seis meses. Han cristalizado proyectos que estaban en fase de maduración antes de la pandemia y todo apunta a que se cerrarán nuevos contratos "en las próximas semanas". Por ello, la empresa mantiene tanto sus objetivos de producción como las previsiones de crecimiento del empleo de la planta de Meatzaldea.

Será en todo caso un "ligero" incremento de en torno al 10% en una plantilla de 70 trabajadores. Lo más importante es que se consolida un nuevo proyecto que se enfrenta, como el resto del tejido productivo, a una crisis que ha dejado sin oxígeno a buena parte de la economía. Además, con "toda la prudencia", la compañía prevé recuperar la actividad comercial en el segundo semestre del año y cerrar contratos que garanticen carga de trabajo en 2021.

Alberto Guerrero, director del área de conversión y automatización de energía de Ingeteam y CTO director tecnológico del grupo, explica a DEIA las claves del buen momento de forma de la compañía vizcaina y en concreto de la división que él dirige. Con una plantilla de más de 4.000 personas en todo el mundo -la mayoría concentrada en Bizkaia, Gipuzkoa, Nafarroa y Albacete-, la empresa ha anunciado tres pedidos en algo más de un treinta días.

Se trata de un contrato con los astilleros Zamakona para el suministro de un motor híbrido para un barco de pesca, un pedido de 14 convertidores de tracción eléctrica para trenes en la República Checa y el suministro a Iberdrola de los inversores que permiten inyectar la energía fotovoltaica en la red de suministro en parques solares en varios emplazamientos en el Estado español y México.

Los dos primeros pedidos se enmarcan dentro del área de la que es máximo responsable Alberto Guerrero. "Son dos contratos muy importantes, alineados con la estrategia de Ingeteam, que a su vez está alineada con las necesidades de nuestro planeta en el futuro", destaca.

Ortuella contará así con alimento para los próximos meses -los convertidores para trenes se entregarán en el primer trimestre de 2021-, pero necesita encontrar sustento con el que garantizarse el crecimiento a partir de entonces.

"El segundo semestre de este año va a ser clave y todo el equipo de dirección está muy animado, porque pensamos que nos vamos a subir muy rápido al tren, nunca mejor dicho, de la reactivación", destaca Guerrero. Todo ello a pesar de que se ha registrado un frenazo de tres meses en la actividad comercial y de que la compañía vizcaina se va a perder la primavera, un periodo de gran dinamismo, con numerosos congresos y ferias que han sido aplazadas o directamente canceladas.

Por ello, "el miedo no es tanto al parón" actual sino a que "no despierte la actividad comercial" debido a que la pandemia no esté bajo control o en el peor de los casos "monitorizada". De ahí que Guerrero destaque las señales de estabilización de la crisis sanitaria. Los contratos internacionales de Ingeteam están muy por encima del 90% y la cúpula directiva de la firma confía en poder viajar lo antes posible

En el horizonte más cercano, seguramente el próximo mes, la división Converters & Automation tiene previsto cerrar nuevos contratos de tracción eléctrica para el sector naval y de suministro para parques eólicos offshore. En otros segmentos como la siderurgia y la minería, "en mínimos" por el covid-19, las expectativas no son tan positivas.

Con todo la visión general es favorable y el foco está puesto en iniciar nuevos contactos en la industria ferroviaria, naval o siderúrgica en el segundo tramo del año para reforzar un área, la de conversión y automatización, que concentra el 20% de la facturación de Ingeteam.

"La carga de trabajo de este año está garantizada por estos y otros pedidos gestados antes del coronavirus. Siempre manteniendo la prudencia y estando alerta, porque existe la posibilidad de que se cancelen algunos contratos. Muchos de nuestros clientes están sufriendo y es difícil saber hasta qué punto", subraya el CTO director tecnológico de la compañía vizcaina.

Respecto al ritmo de la desescalada y la apertura de los mercados internacionales en los que opera Ingeteam, "a pesar de la incertidumbre de la situación", Guerrero considera que las administraciones "están actuando relativamente bien". En ese sentido considera clave mantener un "equilibrio" entre la salud y la economía, porque es precisamente la actividad económica, sobre todo la que genera valor añadido, la que permite reforzar los sistemas sanitarios para hacer frente a alertas como la generada por el covid.

Durante el arranque de la crisis sanitaria, el área que dirige Alberto Guerrero, aunque fabrica principalmente en Euskadi y Nafarroa, ha tenido algún problema de suministro por parte de la estructura internacional. Sin embargo, ya ha superado esa situación y en estos momentos afrontan un horizonte relativamente despejado, siempre "con todas las cautelas".

4.108

La plantilla de Ingeteam supera ligeramente los 4.100 trabajadores a nivel mundial. La nueva fábrica de Ortuella emplea a 70 personas.

637

El volumen de negocio del grupo rondó el año pasado los 640 millones de euros. 39,4

Las inversiones,tanto en I+D, como en inmovilizados, superaran los 39 millones.

"El segundo semestre de este año va a ser clave para garantizar la carga de trabajo de 2021"

CEO tecnológico de Ingeteam