BILBAO. La Hacienda vizcaina ha aprobado el Plan de Lucha contra el Fraude Fiscal para 2020 con los criterios que guiarán su actuación, e intensificará el control sobre los contribuyentes con cuentas en el extranjero, así como sobre las operaciones de grupos empresariales internacionalizados y de grupos fiscales. El fisco vizcaíno dispone de información de 11.000 contribuyentes que, según datos de 2017, tienen cuentas en el extranjero con un saldo total de 1.500 millones.

Estos acciones han sido detalladas en una rueda de prensa ofrecida en Bilbao por el diputado vizcaíno de Hacienda, José María Iruarrizaga, y el director general de Hacienda, Iñaki Alonso.

En su comparecencia, Iruarrizaga ha señalado que es un Plan que cuenta con un "alto componente tecnológico" y ha destacado la importancia creciente que adquieren los desarrollos informáticos a la hora de luchar contra el fraude fiscal. Las actuaciones previstas se centran en tres áreas como son la obtención de información, la prevención y la regularización y el cobro.

En relación al primer eje, el director general de Hacienda, Iñaki Alonso, ha precisado que seguirán desarrollando soluciones informáticas específicas que permitan analizar grandes volúmenes de datos y también seleccionar contribuyentes a los que se debe prestar "especial atención". A través de estas soluciones informáticas, se muestran las relaciones relevantes de estos contribuyentes con otras personas y entidades, y se evalúa el riesgo de un posible fraude.

Alonso ha puesto de relieve la cada vez mayor información que obtienen como consecuencia de los distintos convenios internacionales establecidos para detectar bienes y derechos de contribuyentes vizcaínos en el extranjero.

En concreto, ha precisado que, gracias a un convenio suscrito entre EEUU y España, han recibido desde 2014 datos de 400 contribuyentes titulares de cuentas financieras en entidades estadounidenses.

Por otra parte, en virtud de la directiva europea DAC-1 sobre rentas obtenidas en otros estados miembros de la UE se dispone de datos sobre más de 5.500 personas que cobran pensiones en otros estados de la UE, sobre más de 1.000 directivos que obtienen rendimientos de trabajo en otros países de la Unión Europea y sobre 250 contribuyente con inmuebles en otros estados de la UE.

11.000 CONTRIBUYENTES CUENTAS EXTERIOR

Asimismo, gracias a la directiva europea DAC-2 que entró en vigor en 2016, se cuenta con información sobre cuentas y todo tipo de activos financieros que tienen los contribuyentes de unos estados en otros y, a finales de 2019, la hacienda vizcaína ha recibido los primeros datos relativos a 2017.

En concreto, se les ha facilitado información desde los otros 27 estados de la UE sobre más de 11.000 contribuyentes vizcaínos que declaran un saldo total en el extranjero que asciende a 1.500 millones. Esa información proviene de más de 50 países y zonas del mundo, entre ellos Andorra, Bahamas, Islas Caimán, Panamá o Suiza, que concentra 600 de esos 1.500 millones.

Según han precisado, todavía no se pueden adelantar conclusiones sobre la información relativa a contribuyentes con cuentas en el extranjero, pero se va a dar "el cruce" de datos para poder determinar una posible bolsa de fraude. "Se va a hacer especial hincapié en 2020 a partir de estos datos de que toda esta información sea correcta", ha precisado.

El director general de la Hacienda vizcaína, que cuenta con más de 100 personas en inspección, ha señalado que también se centrarán en analizar los mecanismos de ingeniería financiera que puedan utilizarse para eludir el pago de impuestos y los datos de los grupos multinacionales que tienen presencia en Bizkaia.

El Plan de Lucha contra el fraude en 2020 ahonda en el control sobre los grupos empresariales internacionalizados y también sobre los grupos fiscales.

En relación a los primeros, se trata de luchar contra posibles prácticas de elusión fiscal realizadas mediante el abuso de convenios o de la valoración o localización de operaciones con el fin de tributar menos en Bizkaia.

En el caso de las grandes empresas, se incidirá en determinar si tributan adecuadamente y para ello habrá un control sobre la correcta acreditación y consolidación de deducciones y otros incentivos fiscales.

En relación a los grupos fiscales, la Hacienda vizcaína se centrará en determinar la correcta aplicación del régimen de consolidación fiscal en la determinación del perímetro de consolidación, las eliminaciones de operaciones, las incorporaciones y la compensación de las bases imponibles negativas.

Alonso ha destacado que habrá una "especial atención" sobre esos grupos fiscales, ya que, en la última campaña de Impuesto de Sociedades, la cuota efectiva del impuesto correspondiente a grupos fiscales representa el 52% de la cuota total de este tributo. Alonso ha precisado que son 239 grupos que agrupan a 2.000 contribuyentes.

Asimismo, por su parte, el diputado de Hacienda ha indicado que este Plan recoge los próximos pasos a dar para la implantación de Batuz y del nuevo modelo de Renta.

En relación al nuevo modelo de la Renta, por el que la Hacienda vizcaína hará en 2021 la declaración a todos los contribuyentes y la única modalidad de presentación será a través de una web o app, ha indicado que se ofrecerá a todos los contribuyentes de IRPF el mismo nivel de asistencia que se ofrece hoy en día con Rentaetxean y en 2020 se definirán los servicios que se pondrán a disposición de los contribuyentes "para que nadie tenga dificultades para presentar su declaración".

Además, ha avanzado que en los próximos meses Hacienda facilitará que aquellos contribuyentes que lo deseen puedan obtener la clave bak como método de identificación digital para presentar la declaración de la renta o realizar otras gestiones con las administraciones vascas.

NUEVO REGLAMENTO DE RECAUDACIÓN

Por otra parte, en la comparecencia han informado de la entrada en vigor del nuevo reglamento de recaudación, que simplifica las solicitudes de aplazamiento del pago de deudas tributarias para aquellos contribuyentes con deudas de bajo importe.

Estas solicitudes se concederán automáticamente si son menores a 20.000 euros y se abonan en 36 plazos mensuales de igual importe; si son menores a 50.000 euros y se abonan en 24 plazos mensuales de igual importe y si son menores a 500.000 euros y se abonan en 12 plazos mensuales de igual importe.

Desde el pasado 1 de enero, las solicitudes de aplazamiento deberán realizarse en la sede electrónica de la Diputación, excepto en el caso de las personas físicas que no realizan actividades económicas, que hasta el 1 de enero de 2021 podrán hacerlo de manera presencial.

Iruarrizaga ha explicado que, al conceder automáticamente las solicitudes de aplazamiento que se contemplan en estos supuestos, se facilita el pago de la deuda tributaria por parte de los contribuyentes con deudas reducidas.

El diputado de Hacienda ha precisado que, a lo largo de 2019, los contribuyentes vizcaínos solicitaron 59.000 aplazamientos por un importe total de 772 millones y, tras su análisis, se concedieron 55.000 aplazamientos que suman 443 millones. Según ha detallado, se han ingresado 403 millones de cantidades aplazadas y el saldo pendiente a 31 de diciembre de 2019 es de 329 millones.

Además, ha indicado que, de los 55.000 aplazamientos concedidos en 2019, solo 592 quedarían fuera de los supuestos de concesión automática, sumando una cuantía de 110 millones.