BILBAO. Miles de personas han secundado este 1 de Mayo las manifestaciones convocadas por CC.OO. y UGT en las tres capitales vascas, en las que han reclamado al nuevo gobierno que, en la nueva legislatura, se aborden "en primer lugar" los "problemas" que afectan a los trabajadores. Los dos sindicatos han exigido que se recuperen "los derechos arrebatados", que se pongan en marcha políticas que combatan la desigualdad, y que se deroguen las últimas reformas laborales.

CC.OO. y UGT se han movilizado, como en años anteriores de manera conjunta, bajo el lema 'La lucha continúa-Pertsonak lehenik (Primero las personas) más derechos, más igualdad, más cohesión' en las tres capitales de Euskadi. Sus principales dirigentes en Euskadi, Loli García (CC.OO.) y Raúl Arza (UGT) han participado en la marcha que ha recorrido las principales calles de Bilbao y a la que se han sumado representantes de distintos partidos políticos.

De este modo, han secundado la manifestación una representación del PSE-EE, encabezada por su secretaria general, Idoia Mendia, e integrada, entre otros, por el exlehendakari Patxi López o la diputada diputada vizcaina de Empleo, Inclusión Social e Igualdad, Teresa Laespada. También han participado Oskar Matute y Unai Urruzuno en representación de EH Bildu, formación que ha tenido representación en las diversas manifestaciones convocadas por los distintos sindicatos este 1 de Mayo, lo mismo que Elkarrekin Podemos.

La marcha de CC.OO. y UGT en la capital vizcaína ha partido de la Gran Vía y ha concluido en El Arenal, donde sus secretarios generales se han dirigido a los manifestantes en esta jornada, en palabras de Loli García, de "reivindicación, lucha y movilización".

"Estamos en las calles para reclamar políticas que luchen contra la desigualdad", ha defendido la secretaria general de CC.OO. en Euskadi, que ha alertado de que "la precariedad es la situación más grave que estamos sufriendo en las relaciones laborales de este país".

Por este motivo, ha reiterado la importancia de que la negociación colectiva "recupere la centralidad en las relaciones de trabajo", para lo que "es necesario la derogación de las reformas laborales de 2010 y 2012".

También ha apostado por la lucha por la igualdad de género para "acabar de una vez por todas con esta discriminación que las mujeres venimos sufriendo de manera interminable".

Tras reclamar "empleo de calidad y en condiciones", García ha pedido que "las políticas hacia la gente, hacia la ciudadanía sean el centro del debate político". En este sentido, ha instado a que, en la nueva legislatura que comienza, "se aborden los problemas que afectan al conjunto de la clase trabajadora, que es la mayoría de la ciudadanía".

LA AGENDA SOCIAL

En la misma línea, Raúl Arza ha exigido al nuevo gobierno que se conforme tras las elecciones de este pasado domingo que "ponga la agenda social en primer lugar".

El secretario general de UGT-Euskadi ha incidido en que "el empleo que necesitamos" debe tener "calidad y salarios dignos" y ser "seguro". De este modo, ha insistido en que es preciso "recuperar los derechos arrebatados a lo largo de la crisis" y ha reclamado "dar preeminencia al convenio sectorial frente al convenio de empresa, recuperar la ultraactividad, derogar la reforma laboral del año 2010 y 2012, y reformar las pensiones para devolver la actualización al IPC y derogar el factor de sostenibilidad".

En relación al sistema de pensiones, Arza ha asegurado que el actual es "totalmente financiable" y tiene "futuro" porque, en este momento, tiene "un problema" de ingresos, pero no de gasto, teniendo en cuenta que España dedica "entre 3 y 4 puntos del PIB menos que otros países de nuestro entorno".

Para el dirigente de UGT, el nuevo Gobierno debería hacer "una política con más derechos" y trabajar para que la reivindicación de la igualdad entre hombres y mujeres "se plasme, de una vez, en el boletín oficial". Esas "políticas de progreso", ha asegurado, ayudarán a mejorar la cohesión social.

Por otro lado, ha exigido a la patronal que "suba los salarios", una reivindicación que, según ha recordado, hacen también "casi todos los gobiernos y organizaciones como el FMI o el Consejo de Europa".

Asimismo, ha apelado a recuperar la negociación colectiva en Euskadi, donde más de 385.000 trabajadores tienen su convenio pendiente de negociar o decaído. También ha reclamado al Gobierno Vasco, "principal empleador de nuestro país", que en los próximos años "se tome en serio la reducción de la temporalidad".