BILBAO - Los trabajadores del astillero CNN La Naval de Sestao siguen apostando por una salida a la complicada situación de la empresa bajo el paraguas del sector público pese a que desde el Gobierno español les recuerdan que las ayudas públicas no están autorizadas por las autoridades europeas, más allá del compromiso firmado en 2006 de permitir volver a Navantia a los 150 trabajadores que pertenecían a Izar La Naval cuando fue privatizada. Pese a ello, los trabajadores se manifestaron ayer en Bilbao reclamando una entrevista con la ministra española de Hacienda para solicitar financiación para finalizar la draga pendiente.

Pese a la división sindical existente, los sindicatos que se mantienen en el comité de empresa, CC.OO., CAT y ELA -la central UGT considera que al estar la empresa en liquidación y enviado el ERE de extinción de contratos a todos los trabajadores el comité como tal no tiene función-, hicieron público ayer que van a solicitar una reunión a la ministra españolas de Hacienda, María Jesús Montero, para pedirle su implicación de cara a intentar poner en marcha su plan consistente en comprar la draga paralizada en el astillero y concluir su construcción en las gradas de Sestao. Algo que, según los trabajadores, daría trabajo para unos 20 meses y evitaría el cierre actual mientras se busca una salida.

El secretario del comité, Juanjo Llordén, recordó que la citada propuesta fue acordada por el colectivo de trabajadores en la asamblea mantenida el pasado miércoles.

En opinión de Llordén, la Hacienda española también puede aportar soluciones “porque comprando los activos de la draga para terminarla en Sestao y alquilando las instalaciones solo hace falta voluntad política para adoptar esa decisión y negociar con el armador Van Oord y los bancos, y así empezar a trabajar. Creemos que esa es la única solución”, insistió el representante sindical de CAT.

En todo caso, la plantilla del astillero, los 173 trabajadores afectados, se concentró ayer ante la sede de la Spri, la agencia del Ejecutivo vasco, en Bilbao “en protesta por la ausencia del Gobierno de la reunión mantenida el pasado viernes en Madrid con la ministra de Industria”, quien comunicó a los trabajadores, según Llordén, que el Ejecutivo de Gasteiz le había trasladado que no acudían “por problemas de agenda”.

El representante del comité de empresa señaló que cuando en 2004 se anunció la privatización del astillero, entonces Izar La Naval, el Gobierno vasco “se mostró contrario a esa decisión porque iba a suponer el cierre del astillero”. Según Llordén, el caso se ha dado por lo que el trabajador de La Naval acusó al Ejecutivo vasco “de ponerse de perfil” en esta coyuntura.

La otra salida en el horizonte pasa por la liquidación de la empresa actual CNN La Naval y que nuevos inversores empiecen desde cero en las instalaciones de Sestao un nuevo proyecto de construcción naval pero eso pasa por cerrar la situación actual con rapidez, algo a lo que una judicialización del ERE de extinción de contratos no ayudaría.

Y esto puede ocurrir porque el sindicato CAT presentó ayer su recurso contra la decisión del Juzgado de lo Mercantil que notificó el despido de la plantilla de La Naval a finales de febrero.

Los otros dos sindicatos que anunciaron también la presentación de un recurso contra los despidos, CC.OO. de Euskadi y ELA, comunicaron que harán lo mismo que CAT la próxima semana.