Bilbao. El Fondo Monetario Internacional se mostró ayer inflexible y volvió a reclamar al Gobierno español que incida con las reformas. El camino, ya está mostrado. El FMI recomienda que se aumente el IVA -Impuesto sobre el Valor Añadido- junto a otros impuestos especiales; así como que se aplique un recorte en los sueldos de los empleados públicos. También cree imprescindible que el Gobierno elimine la deducción de compra de vivienda y acelere las privatizaciones. Es lo que se desprende del análisis anual de la economía española correspondiente al Artículo IV de la institución.
Es una senda que el Gobierno conoce ya, porque desde la Comisión Europea han llegado recomendaciones en el mismo sentido. La subida del IVA, que actualmente está en el 18% -cifra inferior a la media europea-, está cada vez más próxima. Aunque el Gobierno español había cerrado esa puerta hasta ahora, ayer -horas antes de conocer las recomendaciones del FMI-, fue la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quien se encargó de entreabrirla, al anunciar que el Ejecutivo "está estudiando" esa opción.
Lo hizo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, al ser preguntada sobre si se podría producir este cambio fiscal antes de que termine el año. Sáenz de Santamaría subrayó que el Ejecutivo "está estudiando" todas las recomendaciones realizadas por la Comisión Europa, incluida esa subida del impuesto que repercute en todo el consumo. "Bruselas ha emitido una serie de recomendaciones que son las que está estudiando el Gobierno", dijo. Hasta entonces, la tesis oficial era otra. La secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, reiteró la pasada semana que el Gobierno "no tiene previsto subir el IVA" -en junio de 2010 ya se elevó del 16% al 18%-. El pasado lunes, fue el vicesecretario general de Organización del PP, Carlos Floriano, el que aseguró esperar que esa subida "no sea necesaria", tras el rescate a la banca española aprobado el fin de semana.
Recomendaciones Sáenz de Santamaría insistió ayer en el Gobierno seguirá el Programa Nacional de Reformas remitido a Bruselas hace pocos días. Programa en el que el Ejecutivo apuesta por introducir cambios fiscales más allá de 2012 para reducir la imposición sobre el trabajo y aumentar la carga fiscal sobre los impuestos indirectos, especialmente los relacionados con el medio ambiente. Pero desde el FMI, uno de los agentes activos en el rescate de la banca española, se urgió al Gabinete Rajoy a efectuar ya las reformas.
El FMI afirma que las recortes de gasto puestos ya en marcha están previstos en las "áreas adecuadas", pero alerta de que "llevará tiempo identificarlas, serán difícil de implementar y sus resultados son inciertos". Por ello estima necesario que se incremente la recaudación de impuestos. En su informe argumenta que en España "hay margen para aumentar los ingresos de la imposición indirecta por medio de la ampliación de la base y de una subida y unificación de los tipos, especialmente sobre el IVA y los impuestos especiales".
Además, para dar garantías de que el ahorro previsto se materializará, pide "futuros recortes en sueldos públicos y aumentos en IVA o en impuestos especiales, ahora". A su juicio, esas subidas de impuesto podrían ponerse ya en marcha ahora de forma temporal "y cancelarlos solo si los objetivos son alcanzados". Según la organización que dirige Christine Lagarde las medidas por el lado de los ingresos deberían desempeñar "un papel más importante".
Asimismo, el FMI cree que la reducción de las cotizaciones a la Seguridad Social es "deseable", pero apunta que debería estar condicionada a la reducción del déficit, y coincide con la Comisión Europea al apuntar que la "reintroducida deducción por vivienda debería ser eliminada".
La institución considera además que, pese al "considerable esfuerzo" de consolidación, el objetivo de fijar el déficit en un tope del 5,3% sobre el PIB "no se alcance en 2012".