Aunque el dinero en efectivo va perdiendo importancia como medio de pago, lo cierto es que todavía hay mucha gente que sigue utilizando de manera habitual los billetes y monedas en sus transacciones diarias. Especialmente los pequeños pagos en establecimientos en los que adquirimos algún producto como por ejemplo el pan, alimentos o chucherías.

Tanto billetes como monedas van cambiando y renovándose periódicamente y por eso debes de tener en cuenta que en febrero de 2024 algunas de las monedas de euro dejarán de estar en circulación y serán retiradas por el Banco de España.

Para esta fecha, bancos y cajas deberán entregar al organismo supervisor del sistema financiero las piezas "que estén en mal estado, tengan defectos visibles o que estén falsificadas", para frenar el avance del fraude y prevenir las estafas o timos.

Estas monedas no aptas para la circulación, así como a las monedas de euro falsas que detecta el sistema financiero (unas 26.000 fueron retiradas en 2022), serán entregadas por el Banco de España a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre para su destrucción.

Si tienes alguna de estas monedas puedes canjearlas por otras de curso legal en tu caja o banco, ya que ambos están obligados a aceptar aquellas que no superen la autentificación. También puedes guardarlas pensando en una posible revalorización en el mercado numismático que puedan producirse en el futuro.

En caso de que tengas cualquier duda el Banco de España explica de forma clara en su web cómo debes actuar en el caso de que dispongas de deterioradas o defectuosas y qué pasos debes seguir para realizar un canje en las entidades financieras.

Al respecto señala que "podrá rechazar el reembolso de las monedas de euros no aptas para la circulación que hayan sido alteradas bien deliberadamente o por un proceso del que sería razonable esperar que tuviera por efecto alterarlas". Como uno de los ejemplos más habituales señala que no procederá al reembolso de las monedas de 1 y 2 euros que presenten "separado el anillo del núcleo" o parezcan "reensambladas".

La eliminación de estas monedas responde pues a un proceso de renovación y saneamiento del dinero en circulación y es habitual que se realice cada cierto tiempo para retirar las piezas defectuosas o que puedan aprovecharse por los delincuentes para cometer fraudes o estafas.

La retirada no afecta a ninguna de las que se vienen utilizando actualmente y las de monedas de uno, dos, cinco, diez, veinte y cincuenta céntimos, además de las de un euro, las de dos euros y las conmemorativas, continuarán siendo de curso legal en nuestro país. 

Lo mimos sucede con los billetes desde los 5 a los 500 euros, que llevan un proceso de renovación similar al de las monedas, aunque de forma más exhaustiva ya que el papel se degrada de forma más rápida que las monedas y además se pueden romper más fácilmente.