Pasan varios minutos de las seis de la tarde cuando los remeros de la Bou Bizkaia comienzan a llegar al club de remo donde les espera el preparador Iker Zabala. A las 18.30 horas en punto se encierran en el hangar de la trainera para escuchar la habitual charla del entrenador previa al inicio de la sesión de entrenamiento. Quedan muy pocos días para la disputa de la segunda jornada de la Bandera de la Concha y Bermeo tiene a su alcance la consecución de la que sería su octava victoria en la regata más prestigiosa de la temporada tras lograr una importante renta de 14 segundos el pasado domingo.
La trainera parte desde el pantalán ubicado en el muelle del martillo, en la zona sur del puerto, y poco a poco se dirige a la bahía de Bermeo, donde desarrollarán la sesión de entrenamiento. Comienza a soplar el viento del noroeste y amenaza lluvia. Varios de los remeros que el pasado domingo bogaron en la primera regata de la Concha quedan en tierra a la espera de que Zabala les requiera a bordo de la Bou Bizkaia. Diego Pérez, joven remero gallego de Bueu, formó parte de la tripulación que se impuso en la primera jornada, en el puesto de hankeko de babor. “Terminamos exhaustos tras una regata muy exigente. Y esto no se recupera de un día para otro. Afortunadamente tenemos días por delante hasta la segunda jornada, la de este domingo”, asegura.
La importancia del descanso
La sesión de entrenamiento es breve y apenas supera la media hora. “El trabajo ya está hecho. Ahora se trata de recuperar bien, de mantener la forma y llegar con chispa a la regata del domingo”, sostiene el preparador. “Es importante que descansen bien –subraya– y que no se produzca ninguna lesión de última hora”. El volumen de entrenamientos ha descendido de manera notable en el rush final de la temporada. Solo restan por disputar la segunda jornada de la Concha y las dos regatas finales de la Eusko Label Liga, en Bermeo y Portugalete. Los remeros comen poco y aburrido. Al arroz o la pasta le sigue la tradicional pechuga a la plancha con fruta o un yogurt en el postre. “No deben comer ni beber mucho porque la intensidad de los entrenamientos ha bajado y es muy fácil coger uno o dos kilos. Si lo multiplicas por 13, son muchos kilos de lastre” advierte Iker Zabala.
Desde hace tres temporadas, los remeros de la Bou Bizkaia no se concentran en Donostia la noche previa a la disputa de la regata y pernoctan en sus domicilios. “Llegamos a la conclusión de que era mejor dejar que cada remero descansara en su casa, pasara las horas previas en su entorno de familia y amigos y tuviera la oportunidad de distraerse”, destaca el preparador.
Llegado el día señalado, los remeros se levantarán antes de las siete de la mañana. El desayuno consistirá en café, tostadas, leche con cereales o yogurt. La trainera bermeotarra saltará al agua hacia las 11.45 de la mañana, 45 minutos antes de que arranque la tanda de honor de la Bandera de la Concha. El calentamiento es suave. “Tienen que sudar un poco pero sin gastar fuerzas para llegar en un estado óptimo a la salida”, explica Zabala.
En una regata de la relevancia de la segunda jornada de la Bandera de la Concha cualquier imprevisto con el material puede resultar decisivo. “Diariamente pido a mis remeros que examinen detenidamente su material: toletes, tostas, estrobos, remos, para adelantarse a posibles roturas. Posteriormente yo mismo inspecciono la trainera de arriba abajo y también lo hacen mis colaboradores. Aun así, nadie se libra del riesgo de rotura de algún elemento” apunta el preparador de Urdaibai.
La Bou Bizkaia logró una gran victoria en la primera jornada de la Bandera de la Concha tras imponerse a todos su rivales y acumular una ventaja de 14 segundos sobre Zierbena y de 15 sobre Donostiarra. No obstante, los bermeotarras anuncian su intención de salir a ganar la segunda jornada sin especular con la renta obtenida en la primera regata. “Afrontamos la segunda jornada sin tener en cuenta lo acontecido en la regata del pasado domingo, como si partiéramos todos de cero. Queremos volver a demostrar que somos la trainera más fuerte de la temporada y saldremos a ganar la tanda y llevarnos la bandera a Bermeo”, significa Iker Zabala.
Con la ventaja lograda en la primera jornada, Bermeo-Urdaibai tiene bien encauzada la que sería su octava victoria en la Bandera de la Concha. No obstante, Zierbena y Donostiarra no arrojan la toalla y tratarán de poner las cosas difíciles a la Bou Bizkaia. “Tanto Zierbena como Donostiarra están obligados a salir a por todas desde el comienzo de la regata para tratar de neutralizar su desventaja con respecto a Urdaibai y tener opciones de adjudicarse la bandera. Sabemos lo que nos espera”, subraya Zabala. “Esta temporada –añade– han demostrado que son capaces de derrotarnos pero saben que si Urdaibai hace bien su trabajo es un rival muy fuerte. Nosotros intentaremos hacer bien nuestro trabajo y olvidarnos de los rivales. Saldremos a romper desde el inicio para ganar la tanda”.
Marea azul en Donostia
Media docena de autobuses saldrán de Bermeo a primera hora de la mañana del domingo rumbo a Donostia para animar a su trainera. “Animo a todos los aficionados de Urdaibai tanto de Bermeo como de Busturialdea y de toda Bizkaia, a que se desplacen a Donostia para que nos animen y para que disfruten de una bonita jornada de remo en un ambiente de respeto y deportividad junto a las aficiones del resto de traineras”, reclama el preparador de Urdaibai.
Iker Portugués Gómez es el remero más joven de la Bou Bizkaia. A sus 23 años ha logrado ondear la Bandera de la Concha en dos ocasiones en la segunda tosta de babor de la trainera de su Bermeo natal. Se muestra optimista para la segunda jornada y apuesta por salir a ganar el domingo. “No podemos afrontar la regata pensando en la ventaja que tenemos. Saldremos a ganar la tanda y volver a derrotar a nuestros rivales”, apunta Portugués. “El equipo está muy bien tanto física como anímicamente –añade– y creo que hemos llegado a la Concha en el mejor momento de la temporada”.