En la embarcación galipa las sensaciones no llegaron acompañadas de resultados. Los remeros de Zierbena sintieron que la trainera iba a más con el paso de las jornadas de la Eusko Label Liga, pero la anhelada victoria siguió siendo esquiva. El pasado fin de semana llegó la confirmación. Los pupilos de Juan Zunzunegui conquistaron el título vasco y el estatal y lo hicieron venciendo en todas sus tandas. Ganaron con solvencia en Lekeitio, cumplieron en la eliminatoria en Pedreña y pusieron la guinda con la victoria del domingo en el Campeonato de España. Tres días que desde Zierbena esperan que sirvan como punto de inflexión y empezar a crecer en una liga en la que están ligeramente rezagados de la tanda de honor.

¿Qué tal está después de este exitoso fin de semana?

—De ánimo bien, con la tranquilidad de haber cumplido durante el fin de semana, y de cuerpo roto. Fueron tres regatas en tres días y disputando las tres. Si se tuercen las regatas, no te vacías igual, pero el viernes fue una de las regatas más intensas de la temporada, el sábado se nos puso de cara y en la segunda parte no fue una agonía. Sin embargo, la del domingo fue durísima. Abrimos hueco en el primer largo pero después estuvo Orio enganchado y no nos dejó aflojar ni una palada.

¿Había ganado alguna vez dos títulos tan seguidos?

—No me cuadró tener dos regatas así tan seguidas. Fue todo un poco apretado. Lo bueno que salió bien. Pudimos disputar y ganar el de Euskadi y el de España. Con cualquier cosa que se hubiera torcido, podíamos haber acabado sin nada pero el equipo respondió y supo afrontar la situación. Aunque dentro de ser tres regatas seguidas, el hecho de que el campeonato fuera el domingo a la tarde nos dio algo de oxígeno, si hubiese sido a la mañana se hubiera complicado todo mucho más.

¿Le sorprendió el rendimiento mostrado en los campeonatos?

—No, ya en el de Bizkaia habíamos visto que la trainera nos andaba bien con esa combinación y en las últimas regatas de liga salíamos del agua con buenas sensaciones pese a no lograr el resultado de la bandera. Físicamente la gente se estaba encontrando bien y remando habíamos encontrado un poco el camino para conseguir esto. Aunque fue muy duro porque al final hicimos solo tres cambios. Uno de ellos fue Eladio que no remó en el de España porque fue padre ese fin de semana y los dos chavales que suelen entrar en la liga remaron en la eliminatoria, lo que nos permitió desahogar a los grandes para que estuvieran frescos para el domingo. Pero ajustamos bien y toda la gente trabajó bien.

Sin el límite de los cupos de la ACT se vio a una trainera muy rápida.

—Sí, funcionó pero el sábado con los canteranos también nos clasificamos para la final con relativa comodidad. Este resultado llama más la atención por las banderas, pero en liga ya notábamos que estábamos un puntito mejor que al principio y ahora tenemos que rematarlo.

Ahora se habla mucho del nivel que da Zierbena sin cupos, pero los canteranos también tienen su importancia.

—La regata del domingo se pudo ganar gracias a los que remaron el sábado, a los que están entrenando entre semana y los que mantienen un nivel cada fin de semana para que la gente pueda llegar con menos carga. Si cada uno está al cien por cien va a aportar lo que tiene que aportar y no tiene que pensar si es canterano, propio o no propio. Lo único que tiene que preocuparse es de estar a su cien por cien y de disfrutar. De hecho el del domingo fue el primer campeonato de muchos remeros que estaban en esa trainera. No sé está llamando a gente que ya viene con muchas cosas ganadas, se está trabajando con gente que tiene nivel y está haciendo su palmarés en Zierbena.

¿Estos campeonatos suponen un punto de inflexión?

—Sí, está claro que la bandera del viernes ya nos dio tranquilidad, sobre todo por la forma en la que se consiguió. Nosotros notábamos que iba rápido pero al final es el premio el que da la confirmación y ayuda a mantener luego la calma cuando las cosas no salen. El domingo sí que notamos que todavía nos falta como equipo madurar un poco más y asentar algunas cosas, pero estamos en buen camino.

¿Cree que podrán trasladar estas sensaciones a la Eusko Label Liga?

—En las últimas regatas de liga nos estábamos encontrando bien y está claro que esto nos va a dar un punto de confianza. La trainera que se clasificó para la final, si le sumamos un patrón canterano, es una trainera de liga. Entonces, está claro que eso funciona también. Tendremos que probarlo en liga y tener las condiciones para ganar la bandera.

Las dificultades que tiene Zierbena al remar en la segunda tanda.

—Por eso. Los equipos estamos en cinco o seis segundos y la tanda y las calles marcan mucho. Hay que hacerlo bien siempre para que el día que está todo como tiene que estar, aprovecharlo. Pero lo primero es hacerlo bien porque si no andas rápido es imposible, por mucho que te toquen las condiciones a tu favor.

¿Cómo afrontan lo que resta de temporada?

—Prácticamente igual. Hay que seguir afinando y ajustando todo porque aún queda lo mejor.

"Con cualquier cosa que se hubiera torcido, podíamos haber acabado sin nada, pero el equipo respondió"

"El resultado llama más la atención por las banderas, pero ya notábamos que estábamos un puntito mejor"