El Bilbao Basket ha recibido una inyección económica de algo más de 428.000 euros, en concreto 428.283 euros, en la ampliación de capital que abrió a comienzos de noviembre. De esta manera, el nuevo capital social de la entidad queda fijado en 1.203.360 euros, según fue registrado el pasado martes en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME). Esta cantidad, que se une a los ingresos por la venta en febrero de Axel Bouteille al Unicaja, supone una ayuda muy necesaria en estos tiempos de absoluta incertidumbre en el área económica por culpa de la pandemia del coronavirus, que puede comprometer algunos de los deseos transmitidos por el consejo de administración en la última junta de accionistas de noviembre, en la que se aprobó un presupuesto para esta temporada de 3,6 millones de euros.

En este sentido, el club tenía contraídos tras la salida del concurso de acreedores unos compromisos de devolución de deuda, reducida a tres millones de euros, que debía empezar a cumplir este año y mostró su deseo de explorar en la captación de nuevos patrocinios y abonados que no van a ser posibles por la interrupción de la temporada. Si no se reanuda la competición, la ACB estima una pérdida de ingresos de entre el 20 y el 25% para todos sus clubes a los que, además, se les abre un horizonte de un baloncesto sin público al menos hasta 2021, lo que supondrá una merma de abonos y taquillaje.

Como consecuencia de esta ampliación de capital, se esperan cambios en las personas que componen el consejo de administración de la entidad vizcaina, aunque Isabel Iturbe y Carlos Del Campo, que han cumplido ya cinco años en el club, han sido reelegidos como consejeros después de que la junta aprobara ampliar el plazo de permanencia en el órgano de mando. Mientras se haga oficial este nuevo rumbo, el Bilbao Basket no se ha quedado de brazos cruzados y ha tomado algunas decisiones importantes desde el punto de vista deportivo que hacen pensar que el aspecto económico está al menos bajo control. Así, el club ha empezado ya la configuración de la próxima plantilla con la renovación de Álex Mumbrú como entrenador en un movimiento que era prioritario y ha avanzado en algunos fichajes y en la continuidad de otros, que quizás sea más factible ahora que el Bilbao Basket ha comprometido su presencia en la Basketball Champions League atendiendo a “criterios económicos y deportivos”.

Es el nuevo reto que se ha planteado un club que justo ayer celebró los 16 años de su primer ascenso a la ACB, que logró el 21 de mayo de 2004 en el tercer partido del play-off en la cancha del Baloncesto León.