MADRID. "El viernes acabé frustrado, pero me duró poco. Siempre me doy un tiempo para estar frustrado y sentir esa emoción porque si la evito, va a acabar saliendo en otro momento", explicó Rahm poco después de terminar su vuelta y conseguir -4 en su tarjeta.

"Es difícil jugar mejor este campo, ojalá juegue igual de bien desde el tee el resto del año. Relaja mucho llegar a la salida, saber que la voy a poner en calle y tener un palo corto a green", maniestó el de Barrika, que quiere alcanzar al líder Christiaan Bezuidenhout este domingo.

Rahm valoró positivamente sus sensaciones. "Los drives han sido perfectos, pocas veces juego tan bien y eso me ha permitido hacer un buen resultado. No solo eso, las maderas 3 y los hierros, todos bien encaminados, todos en buenas posiciones", finalizó.