Bilbao - No hay tiempo para lamentarse y Jon Rahm ya está de nuevo en un campo después de su mayor decepción hasta ahora del año como fue quedar fuera del corte en el PGA Championship. La posibilidad de revancha llega pronto y el de Barrika disputa desde hoy el Charles Schwab Challenge en el Colonial Country Club de Fort Worth, donde hace dos años fue segundo a un golpe de Kevin Kisner y el año pasado quinto a diez de Justin Rose, que dominó con autoridad. Parece, por tanto, que el recorrido texano le va bien a Rahm, que promedia 67 golpes por vuelta y tendrá la oportunidad de quitarse de encima la frustración con la que acabó el segundo major del año después de que la bola acabara demasiadas veces en zonas complicadas. En este sentido, el barrikoztarra necesita sentir de nuevo su juego en orden porque será su último torneo antes del US Open que se jugará en Pebble Beach del 13 al 16 de junio.

La premisa básica será recuperar la precisión desde el tee de salida. El drive es el mejor golpe de Jon Rahm y en Bethpage le abandonó por completo. El vizcaino jugará los dos primeros días (hoy a partir de las 19.55 y mañana a las 14.55) con el estadounidense Xander Schauffele y el taiwanés CT Pan, ganador hace unas semanas en Hilton Head. El elenco del Charles Schwab Challenge incluye a cinco de los diez primeros de mundo: al margen de Rose como campeón defensor, que busca imitar a Ben Hogan y encadenar dos victorias, están Francesco Molinari, Rickie Fowler, Bryson DeChambeau y el propio Schauffele.

Además, jugadores como Paul Casey, Ian Poulter, Tyrrell Hatton, Tony Finau, Louis Oosthuizen o Jordan Spieth, ganador en 2016 y que ha dado un salto tras su tercer puesto en el PGA Championship, elevan el nivel de un torneo que se disputa en un campo emblemático en Estados Unidos, un par 70 de algo más de 6.500 metros, y que se mantiene como una de las sedes del PGA Tour de forma ininterrumpida desde 1946. El récord del torneo al término de las cuatro vueltas es de Zach Johnson, con 21 golpes bajo par, y la mejoro vuelta es de 61.

El premio que reparte el Charles Schwab Challenge, además del trofeo de gran tamaño y de la dotación económica, es una llamativa chaqueta a cuadros. Como curiosidad, también jugará Ryan Palmer, quien compartió victoria con el golfista vizcaino en el Zurich Classic y que es miembro del Colonial Country Club. - Roberto Calvo