Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) se ha salido con la suya. En su afán por romper con todo lo anterior, con cualquier asunto defendido o apoyado por Ángel María Villar, principal impulsor de que la Eurocopa de 2020 tuviera a Bilbao como una de sus sedes, el máximo mandatario de la RFEF ha conseguido lo que llevaba meses buscando, que la capital vizcaina quede fuera de la competición continental que arrancará el próximo mes de junio y que fue pospuesta un año atrás debido a la pandemia del coronavirus. En su lugar, serán la ciudad de Sevilla y el estadio de La Cartuja quienes acogerán los cuatro partidos que debían disputarse en San Mamés: tres de la fase de grupos, los tres en los que España ejercerá de local, ante Suecia, Polonia y Eslovaquia, respectivamente, así como un cuarto, correspondiente a los octavos de final. En ellos, la Junta de Andalucía le ha garantizado al máximo organismo de clubes europeos que se ocupará al menos un 30% del aforo total de La Cartuja, que es de 60.000 espectadores, por lo que en las gradas se darán cita en torno a 18.000 personas.La elección de Sevilla en lugar de la capital vizcaina era un secreto a voces, más aún después de que a última hora de la tarde del miércoles las instituciones vascas que forman parte de la Sede Bilbao hicieran público que la UEFA les había comunicado ese mismo día que “de forma unilateral” retiraba el campo de San Mamés como sede de la Eurocopa. Así las cosas, la ciudad andaluza, que en lo que va de 2021 ha sido sede de la final de la Supercopa y de dos finales de Copa, tres acontecimientos en los que el Athletic ha estado presente, se lleva el premio gordo que tanto tiempo llevaba organizando Bilbao.

Así lo anunció en la mañana de ayer el Comité Ejecutivo de la UEFA, quien confirmó que la cita futbolística también visitará Alemania, que en su sede de Múnich, cuya aprobación ha estado en el aire hasta última hora, habrá al menos 14.500 aficionados. Aunque para que esto suceda, tal y como confirmó ayer el ministro alemán de Sanidad, Jens Spahn, Alemania tendrá que romper antes la tercera ola de la pandemia. “Considero, visto a día de hoy, que no se puede descartar” la celebración de encuentros en Múnich, aunque matizó que “ tampoco deben crease muchas expectativas”. “Con tres meses de antelación es difícil”, dijo. En este sentido, cabe recordar que esta pasada madrugada ha entrado en vigor en Alemania el primer toque de queda nocturno, que impedirá a las personas estar en la calle entre las 22.00 y las 5.00 horas, en las regiones que superen los 100 casos por cada 100.000 habitantes en una semana.

Como ha sucedido con Bilbao, la capital de Irlanda, Dublín, tampoco acogerá ninguno de los cuatro partidos que estaba previsto que se disputarán allí. Así, los encuentros Polonia-Eslovaquia, Suecia-Eslovaquia y Suecia-Polonia correspondientes a la fase de grupos se celebrarán finalmente en el Gazprom Arena de San Petersburgo. Mientras que el choque de octavos que le correspondía se jugará en el estadio londinense de Wembley.

Con la caída de Bilbao, pese a que su lugar lo ocupará Sevilla, y Dublín, finalmente serán once las ciudades europeas en las que se disputará la Eurocopa: Múnich (Alemania), Bakú (Azerbaiyán), Copenhague (Dinamarca), Budapest (Hungría), Glasgow (Escocia), Roma (Italia), Sevilla (España), Ámsterdam (Holanda), Bucarest (Rumanía), San Petersburgo (Rusia) y Londres (Inglaterra). En esta última se jugarán las dos semifinales (6 y 7 de julio) y la gran final, prevista para el 11 de julio.

la uefa y ceferin, contentos

En el comunicado hecho público ayer, la UEFA señaló que “tras la decisión de las autoridades locales, quedó claro que era muy poco probable que los aficionados pudieran asistir a los partidos que estaban programados para jugarse allí (en Bilbao). Por lo tanto, con la ayuda de la Real Federación Española de Fútbol, la UEFA propuso trasladar esos partidos a otra sede de ese país anfitrión simplemente para que los aficionados pudieran asistir a los partidos después de un año sin poder ver fútbol en directo en los estadios”. Agregan, asimismo, que “esta decisión creará un ambiente festivo en todos los partidos que se celebren en la competición de selecciones nacionales más importante de la UEFA”.

A pesar de que las instituciones vascas expresaron el miércoles su malestar por la decisión adoptada así como por el trato dispensado hacia la sede de San Mamés, Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, aseguró ayer que el organismo que dirige “ha trabajado con diligencia con las asociaciones anfitrionas y las autoridades locales para garantizar un entorno seguro y festivo en los partidos” y se mostró “muy satisfecho de poder dar la bienvenida a los espectadores en todos los partidos para celebrar el fútbol de selecciones en todo el continente”. Además, Ceferin expresó su “reconocimiento y gratitud a las ciudades de Bilbao y Dublín -ambas consideradas como buenas sedes para albergar futuros eventos de la UEFA-, a los gobiernos nacionales y regionales de España y de la República de Irlanda, y a todas las partes locales interesadas por su dedicación, profesionalidad y esfuerzos durante los últimos años”.

reacciones

Ante la decisión de la UEFA, las reacciones no se hicieron esperar. El viceconsejero de salud del Gobierno vasco, José Luis Quintas, rechazó ayer que fueran “excesivos” los criterios sanitarios que establecieron las instituciones vascas para que la Eurocopa se disputara en San Mamés. Quintas defendió que estos eran “exactamente los mismos que para un partido de tercera regional o que para un concierto de música de cantautor”. Las instituciones vascas establecieron que el aforo fuera de un 25% para que pudiera haber público en La Catedral. Condiciones que, según el viceconsejero de salud, están marcados por el Plan Bizi Berri III.

En lo que a la RFEF se refiere, el organismo que dirige Rubiales consideró que se trata de “un éxito de incalculable valor haber podido salvar la plaza para España” como sede de la Eurocopa. “La UEFA ha premiado el esfuerzo realizado por la RFEF para garantizar la sede en nuestro país. Teniendo en consideración el contexto actual de la pandemia, existían dos posibilidades con respecto a la sede. Por un lado, que se fuera a una de las ciudades internacionales que la habían solicitado o bien que se mantuviera España. La RFEF considera un éxito de incalculable valor haber podido salvar la plaza para nuestro país”. Además, agradeció a Bilbao “el trabajo que ha desarrollado por su candidatura a pesar de que, finalmente, la UEFA haya decidido optar por otra ciudad como sede debido a la proyección de público programada para el mes de junio”.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, aseguró a través de Twitter que la disputa de la Eurocopa en Sevilla es “un sueño”. “Hacemos realidad un sueño: la Eurocopa se viene a Sevilla. Veremos a España en La Cartuja”. Además, agradeció el apoyo de la RFEF: “Nuestra alianza sigue dando frutos”.

“Los criterios eran exactamente los mismos que para un partido de tercera regional”

Viceconsejero vasco de Salud

“Hacemos realidad un sueño: la Eurocopa se viene a Sevilla. Veremos a España en La Cartuja”

Presidente de la Junta de Andalucía