BILBAO. El internacional brasileño Philippe Coutinho fue presentado ayer como nuevo jugador del Bayern de Múnich, equipo en el que espera estar “muchos años” y ganar muchos títulos. El campeón alemán pagará al Barcelona por el año en préstamo 8,5 millones de euros, además de hacerse cargo de la ficha del jugador, que asciende a 13 millones de euros. El acuerdo prevé una opción de compra del Bayern a final de la temporada por 120 millones de euros.

Coutinho, que llevará el 10 a la espalda que dejó vacante Arjen Robben, ya retirado, mostró su satisfacción por reconducir su carrera, cortada de cuajo a la sombra del Camp Nou y bajo la presión de su altísimo coste. No pudo ser más optimista en su primera conferencia de prensa, que ofreció junto con el director deportivo del club, Hasan Salihamidzic, y el presidente del Consejo Directivo, Karlheinz Rummenigge. “Cuando Hasan me preguntó si quería venir al Bayern no tuve duda alguna”, remarcó el centrocampista brasileño.

Coutinho logró culminar su gran objetivo el 7 de enero del 2018. Ese día, durante el mercado de invierno, fichó por el Barça no sin antes hacer lo imposible hasta convencer al Liverpool para que le abriera la puerta de salida. Se convirtió en el fichaje más caro en la historia barcelonista: 120 millones más otros 40 en variables. Llegó a jugar como azulgrana 76 partidos, 55 de ellos como titular, pero ni como interior ni como extremo supo encontrar su sitio, enganchar con la grada del Camp Nou y mucho menos hacer olvidar a dos ilustres que campearon por la banda izquierda, Andrés Iniesta y Neymar.

Solo contabilizó 21 goles (13 en la Liga, 5 en la Copa y 3 en Champions) y casi se le recuerda más por su desplante a la afición culé respondiendo a los silbidos de la hinchada en el Camp Nou, en un partido ante el Manchester United, tapándose sus oídos con los dedos para celebrar un gol.

Ahora Coutinho busca reencontrarse en el Bayern y el Barça rehabilitarle para luego rentabilizar su talento con un magro traspaso. De momento, Rummenigge agradeció las facilidades recibidas para culminar la operación. “Creo que con él nuestro equipo gana calidad”, predijo.

Rummenigge llegó a calificar el pago por la cesión, 8,5 millones, de “precio de amistad” ante las cifras que se mueven en el mercado aunque también admitió que la opción de compra tiene un precio alto. “Con pocos clubes tenemos relaciones tan estrechas como con el Barcelona, que no quería bloquear la operación ante el hecho de que Philippe quería venir a Múnich a toda costa”, explicó el dirigente del club bávaro. Y el Barça deshacerse de él, se podía añadir.

Para Rummenigge los planes con Coutinho son a largo plazo y destacó que para resaltar la importancia del jugador se le ha dado el dorsal de Arjen Robben, que triunfó en el Bayern durante nueve temporadas. Es decir, recuperar el fútbol que le consagró en su etapa con el Liverpool.

A vueltas con neymar Con esta cesión, el Barça se quita un problema de encima, además de ahorrarse un buen dinero, pero también se queda sin su mejor baza, al menos eso se había especulado, para negociar con el PSG el regreso de Neymar.

Porque a falta de dos semanas para cerrarse el mercado de fichajes, ayer se escribió otro capítulo de este culebrón. Según la emisora RAC1, citando fuentes de la negociación, el Barça presentará en breve una oferta al club parisino para reclutar a Neymar para esta temporada en calidad de cedido, con la posibilidad de compra al finalizar el curso. La misma estrategia del Bayern con Coutinho.

La novedad en la propuesta es que el Barça descarta el intercambio de jugadores. Se había especulado mucho sobre el traspaso de dos jugadores (Coutinho y Rakitic) más una cantidad de dinero a cambio de Neymar. RAC1 cita a una fuente de la negociación en la parte barcelonista, donde se destaca que con esta oferta al PSG los dirigentes del club catalán están “confiados” y ven “una opción” de acuerdo viable. A la citada reunión asistieron la plana mayor del club, con el presidente azulgrana, Josep Maria Bartomeu, a la cabeza, y el empresario brasileño André Cury, cercano a la familia Neymar.

En el encuentro también se ha valorado contemplar en la propuesta al PSG no sólo asumir la ficha de Neymar en el año de la cesión, sino también el pago de una cantidad económica, que no ha trascendido, como ha hecho el Bayern con el Barça, abonando los 8’5 millones de euros por la cesión de Coutinho.

Y es en este momento, cuando la el divorcio de Neymar con la afición del PSG parece irreversible (fue insultado en el arranque liguero en el Parque de los Príncipes) y se busca una pronta salida, cuando surgen voces reclamando lo contrario. La derrota ante el Rennes (2-1) el pasado domingo ha disparado las alarmas. El influyente Le Parisien exigía ayer que se cierre ya la incertidumbre. “Hay que decirlo, repetirlo y recalcarlo porque no cambiaremos nunca de opinión: París no será más fuerte sin Neymar”, sentenció el diario.