En el santuario de Arrate aún resonaba el eco de la traca final de la Itzulia y el triunfo de Roglic. Pero el día era otro, muy distinto. El sol que saludó al esloveno fue la lluvia que aplaudió a Pau Miquel, vencedor del Memorial Valenciaga, la clásica más prestigiosa del ciclismo amateur. Miquel fue la punta de lanza del Lizarte, que firmó un doblete. Tras el barcelonés se clasificó Igor Arrieta, hijo de José Luis Arrieta, director del Movistar. La victoria de Miquel, nuevo líder de la Copa España, subrayó el dominio del Lizarte en la 50ª edición de la carrera.

El Valenciaga se decidió una vez se apagó la llama de Brustenga, vencedor de la Aiztondo Klasika, Mujika (Caja Rural) y Joseba López (Eulen) que trataron de sorprender desde la larga distancia. El Lizarte, perfectamente organizado, ordenó la ofensiva definitiva en San Miguel. Arrieta, apenas 18 años, se pintó la cara de guerra. Unai Iribar (Laboral Kutxa) también estuvo en la refriega, pero se vio obligado a dimitir. Miquel y Eugenio Sánchez acompañaron después a Arrieta. El trío, miembro de la misma cooperativa, no regateó el esfuerzo, pero Sánchez, fatigado, tuvo que serenarse y levantar el pie.

Miquel y Arrieta compartieron esfuerzo hasta que el ciclista barcelonés, un tallo de 1,80 metros y 60 kilos, dejó la compañía de Arrieta, magnífica su actuación en el Valenciaga. Pau Miquel está completando un curso de ensueño. Fue segundo en Estella, tercero en Zumaia, cuarto en Amorebieta y Colindres, séptimo en la Aiztondo Klasika y octavo en Durango. Arrieta completó el festival de Lizarte en el santuario de Arrate. La tercera plaza la ocupó Pablo Uria.

Memorial Balenziaga

Igor Arrieta