Cada nuevo curso está marcado por una mezcla de sentimientos que acostumbran a repetirse. La ilusión de un nuevo comienzo se cruza con la incertidumbre propia ante las renovadas plantillas. Son las dudas lógicas antes de arrancar el año y en esta ocasión ese desconocimiento se multiplica para el HGB Ausarta Barakaldo. La revolución en las competiciones FEB, con la creación de la LF Challenge y la reestructuración de los grupos, hace que las de Ezkerraldea se enfrenten por primera vez a muchas rivales. Sin embargo, el conjunto dirigido por Alberto Cea no tiene miedo ante este desafío. En los últimos años el club ha crecido hasta convertirse en un habitual de la categoría y quiere mantener otro año más vivo su sueño de competir a este nivel. Su primer reto para ello será mañana a las 12.30 horas ante el Unicaja, uno de los equipos llamados a estar en la parte alta de la clasificación. En esta liga también compite el GDKO Ibaizabal, pero su estreno será la semana siguiente.Las horas se hacen largas con el descorche de la competición a la vuelta de la esquina. Las jugadoras del HGB Ausarta Barakaldo apuran sus últimos entrenamientos y en la mente gana fuerza ese deseo de que el balón salte al aire y comience la Liga Femenina-2. “Estamos con muchas ganas. Cuando estás tiempo sin competir y se acerca la fecha, todo el mundo tiene esa ilusión por empezar la liga y ver cómo estamos en partido oficial. Queremos trasladar las sensaciones de pretemporada al inicio liguero”, comenta Alberto Cea. Las de Ezkerraldea se estrenarán en un nuevo grupo y deberán viajar con frecuencia a Andalucía, lo que genera cierta incertidumbre tanto en el aspecto deportivo, como sobre todo logístico. “Lo primero que desconocemos son las jugadoras de allí, las de casa. Tampoco sabemos realmente cómo nos va a afectar el tema de los viajes, que son más largos y exigentes. En lo deportivo, son equipos potentes como Unicaja, Melilla, Almería, Córdoba... Aunque estamos expectantes por ver que somos capaces de hacer”, analiza el técnico de Barakaldo.

El objetivo de las vizcainas es claro: la salvación. Es el primer paso de este curso y luego ya llegarán retos mayores: “Para que el club pueda seguir en este tipo de saraos, hay que conseguir que esté en la categoría. Hay mucha incógnita, el año pasado había más diferencia entre las de arriba, las del medio y las de abajo y este al igualarse todo quizás la permanencia esté más cara. El objetivo es salvarse y ser competitivos, dar una buena imagen”. Para afrontar este reto, el club de Ezkerraldea ha confeccionado una plantilla bastante renovada y joven, en la que mezcla jugadoras vizcainas con internacionales dispuestas a aportar su granito de arena y reivindicarse a este nivel. “La diferencia con el año pasado es que esa plantilla también era joven pero tenía más experiencia en esta competición. Pero el equipo nos gusta porque es muy trabajador, le gusta entrenar. Cuando tienes un equipo veterano el día a día es más difícil porque hay que ir controlando ritmos y cargas. Esta gente entrena lo que le eches”.

El HGB Ausarta Barakaldo busca prolongar su idilio en las competiciones de la Federación Española de Baloncesto. Crecieron poco a poco, dando pasos pequeños a cada temporada y finalmente llegaron a una categoría en la que se han consolidado plenamente. “El club tiene 22 años y en los últimos ocho ha ido en pleno crecimiento a nivel de categoría nacional. Que nos reconozcan en el pueblo, que cada ver notemos más el apoyo de la gente y tener un poco más de visibilidad, nos es suficiente para reconocer el trabajo que hace mucha gente”, apunta Cea. Esa trayectoria iniciará un nuevo capítulo mañana en Lasesarre ante en Unicaja y desde el club esperan que sea otro paso más en su línea ascendente de las últimas temporadas.

“Para que el club pueda seguir en este tipo de saraos hay que conseguir que esté en la categoría”

Entrenador del HGB Ausarta Barakaldo