Arabia Saudí está cada vez más interesada en hacerse con todos los deportes punteros para promocionar el país. Esta vez ha sido el turno del tenis, donde un simple torneo de exhibición ha garantizado 1,5 millones de dólares a los participantes por el mero hecho de acudir. A esto hay que sumarle un plus de 4,5 millones para el ganador, haciendo un total de 6 millones la posible recompensa total, superior a cualquiera de los cuatro Grand Slams.

Los invitados de este año son Carlos Alcaraz, Jannik Sinner, Alexander Zverev, Taylor Fritz, Novak Djokovic y Stefanos Tsitsipas. El evento se podrá ver íntegramente a través de la plataforma Netflix.

La raqueta de oro como símbolo

La edición de 2024 fue la primera de un torneo que parece que ha llegado para quedarse. El italiano, Jannik Sinner, logró hacerse con el botín final de 6 millones. Lo hizo venciendo en la final al español Carlos Alcaraz, actual número uno del ranking ATP.

Por otro lado, la organización quiso rendir homenaje a la carrera del tenista Rafael Nadal entregándole la raqueta de oro, valorada en 250 mil euros. Este obsequio no solo premiaba una brillante carrera del balear, sino que era la viva imagen de la opulencia y riqueza que desprende este torneo.

Rafael Nadal posa con su raqueta de oro junto Turki Al Sheikh, asesor de la Corte Real de Arabia Saudí y presidente de la Six Kings Slam Getty Images

Poderoso caballero es don dinero

Resulta curioso cómo muchos de los tenistas que participan en la cita de este año se han quejado de lo cargado que está el calendario actual de tenis, y sin embargo, acuden a Arabia Saudí a disputar una competición que no les dará ningún punto para el ranking ATP.

"El calendario actual no es sostenible. Hay demasiados torneos y no hay tiempo suficiente para recuperarse", declaró Alexander Zverev. El estadounidense Taylor Fritz también hizo un comentario al respecto: "Es una locura, simplemente no paramos de añadir cosas al calendario, una y otra vez". O el mismo Novak Djokovic, para muchos el mejor tenista de la historia: "Hay gente que no quiere cambiar las cosas. El calendario actual es un desafío para los jugadores", comentó el serbio.

El tenista serbio Novak Djokovic DPA vía Europa Press

El único motivo para asistir a este evento es el económico; 1,5 millones solo por participar, por lo que los jugadores acuden aunque no estén al 100% físicamente.

El deporte como lavado de cara

El país árabe lleva años siguiendo una estrategia de promoción del país a través del deporte. Esta estrategia se ha hecho patente en el fútbol, con jugadores veteranos y jóvenes promesas que se trasladan al país para garantizar su futuro económico. Muestra de ello es que el reino árabe será el encargado de acoger el Mundial de fútbol de 2034.

También han organizado competiciones de boxeo, golf y automovilismo. El país apuesta por grandes nombres y premios millonarios para mejorar su imagen y consolidarse como un actor relevante en el panorama deportivo global.