EL deporte y sus colores, sus matices, su fuerza brava y la sutileza con la que a veces se practica o se remata. El deporte como fuente de inspiración y motivación para personas de este ancho mundo. Desde atletas y entrenadores hasta aficionados y entusiastas seguidores de un club, de un equipo o una hazaña, el deporte tiene poderes sobrenaturales: pasear el ánimo por las nubes, forjar el carácter en la fragua del tartán, el césped, el parqué, el hielo o el cemento, y enseñar valiosas lecciones de vida en la pizarra de los esfuerzos. El deporte y su más allá, que tanto nos deja...

En un año olímpico como el que estamos inmersos DEIA invocó a los dioses elegidos con una sagrada llamada para agasajarles en la cuadragésima sexta edición de los Euskal Kirolaren DEIA Sariak. Como si les guiase el recuerdo de Leónidas de Rodas, que consiguió repetir las victorias de Chionis de Esparta en sus dos especialidades durante cuatro Juegos Olímpicos consecutivos, DEIA dio en la diana, marcó gol, encestó, hizo un dos paredes, arrancó de lo lindo. Veámoslo en esta historia que ahora les cuento.

22

En imágenes: Las fotos de los premios de la gala DEIA Kirol Sariak Borja Guerrero

La concurrencia se arremolinaba en los exteriores del Palacio Euskalduna habida cuenta que era una tarde de sol, uno de eso extraños días de primavera en febrero. Allí se saludaban, por ejemplo, Andoni Goikoetxea y Manolo Delgado Meco con Jorge Barrie; el presidente del Barakaldo, Ricardo Arana, con el presidente del comité de entrenadores de la Federación Vasca de Fútbol, Roberto Pérez Blanco, o Manuel Villaverde, presidente de la centenaria Peña Motorista Vizcaya con buena parte de su cónclave. Allí Adam Smith posaba con los suyos al sol (la gala anunciada le transmitía sensaciones de familiaridad...) y el pelotari Diego Beaskoetxea veía cómo llegaban otras gentes diestras en el deporte, acompañado por Saioa Pérez. Allí posaban seguidores de la Sociedad Deportiva Retuerto Sport y de la Unión Sport San Vicente o una delegación de la cuadrilla del Kaiku femenino, como si estuviesen a un paso de lanzarse al agua. Allí la vida fluía...

A la cita no faltaron el director general del Grupo Noticias, Juan José Baños; Nagore Arregi, embajadora plenipotenciaria de Altuna y Uria; el consejero Bingen Zupiria; las diputadas forales Leixuri Arrizabalaga y Ainara Basurko; la alcaldesa de Bilbao en funciones, Amaia Arregi; la directora de DEIA, Marta Martín, quien aprovechó el paso para enviarle recuerdos al alcalde Juan Mari Aburto en su convalecencia e insistir en las maravillas de la web de DEIA; Aitor Aranburu, emisario de Kutxabank, y el director general de Editorial Iparraguirre, Javier Andrés. Eran los protagonistas del retablo de autoridades, un bajorrelieve de mandatarios. 

Intercalados entre los presentes se movía el jurado, quiere decirse, buena parte de la plantilla de Kirolak de DEIA. Desde Unai Muñoz a Nagore Marcos pasando por Aitor Martínez, Igor G.Vico, César Ortuzar, Pako Ruiz o una vieja gloria como Julian Goikotxeta. No nombraré aquí a José Manuel Monje porque suyo fue el encargo de presentar la gala junto a Yaiza Arrizabalaga. El hijo del primero, Pablo Monje, seguía todo con emoción e interés. Vieron cómo los jugadores del Athletic premiados -Mikel Vesga, Óscar de Marcos y Nico Wlliams - hicieron sombra (es decir no acudieron al encuentro...) aunque sí enviaron vídeos de agradecimiento y de disculpa (el de Nico, con un escueto “muchas gracias”, encadenado al sentido discurso de De Marcos levantó una ola de carcajadas...), un poco al estilo de Andoni Gago, quien se animó a mover los brazos como molinos de viento mientras Dani Montero le presentaba, a ritmo de speaker, para regocijo de los presentes. Antes habían evocado, con nostalgia, la Grand Départ Pays Basque, la salida del Tour que tanto emocionó el último verano. 

En cierta ocasión le preguntaron al escritor Roberto Fontanarrosa qué deseaba para su hijo y su respuesta fue antológica: “Que sus amigos se pongan felices cuando le ven llegar”. Esa sensación es la que se vivió ayer en el Palacio Euskalduna, una tierra a la que acudieron, además, el alcalde de Basauri, Asier Iragorri, Jon Zugazagoitia, Olatz Legarza, directora de Basque Team; Luis Uriona, gerente del grupo Meuri; Leonides Gutiérrez, de Cycasa; Amaia Vallejo, de Sercoin; Jon Larrea, presidente del Amorebieta; Ángel Castro y Fernando San Cristóbal, representantes del River; Ricardo Arana, Endika Buján (cuando comentó que aún no había firmado con el Athletic cuando DEIA lo anunció en sus paginas se desató una tormenta de carcajadas...) y Julen Huidobro, del Barakaldo CF; Aitor Aranburu, director general de negocio minorista de Kutxabank; el directivo rojiblanco Igor San Román (prometió raparse si este año se desempolva la gabarra...), Jon Ander Elorriaga, director general de Alse; Naia Laso, que sueña con los Juegos Olímpicos de París, Carlos Sergio, Imanol San Miguel, Aitor Arri, Estanis Escauriaza, Gaizka Legarra, David Sasia, Edu Cortés, Joar Zabala, Jaime Escudero, Jagoba Carrera, Xabi Ruiz, Jon Tardaguila, Mateo Iván Pérez, Jon Ander Albizuri, Aitor Larraona, Rafael Arberas, Jon Ugalde, María Urkidi, Juanma Bilbao, Ekaitz Zarandona, Alberto Alday, Amaia Alday, Marta Gonçalves, Itziar Unibaso, Itziar Aginagalde, Isaac Amezaga, Gorka Mostajo, Aitor Elizegi, Iker Goñi, Nerea Lupardo, Rebeca Beobide, Tomás Olarte, de Acciona; Iñaki Latorre, Mikel Ibarrondo, Herri Torrontegi, Olatz Pagola, Fernando Zubeldia, Luis Sastre, de La Compañía; Alex Bilbao y Ramón Viqueira, ambos embajadores de Surne; Susana Alaguero, Josune Iratxeta, Eduardo Gallo, José Félix Ruiz, Fran Núñez, Carlos Ballesteros y Santiago Bacigalupe, integrantes de la Federación Bizkaina de Lucha; Aitor Argote, Itziar Carrocera, Óscar Cavia, Yurdana Burgoa; la alcaldesa de Santurtzi, Karmele Tubilla, Yolanda Aberasturi, Inés Jauregi, de Coca Cola, Enrique Thate, José Ángel Pereda; el director de Desarrollo de Negocio de DEIA, Ibon Mujika, y la directora comercial, Aitziber Jauregi; el presidente de BilbaoDendak, Rafa Gardeazabal, Jon Zarate, Jorge Aio, Susana Alaguero, Carlos Alonso, de la Federación vasca de Judo, y toda una población que disfrutó de lo lindo.