el Leioa WLB acaba de terminar una temporada histórica. Casi perfecta. El conjunto de Sakoneta se convirtió en el primer equipo vizcaino que consiguió llegar a la División de Honor del waterpolo estatal. Por lo que esta campaña se paseó por las mejores piscinas y se codeó con la élite. Y lo hizo todo con jugadoras de casa. Tirando de cantera. Sin embargo, el salto de categoría fue demasiado para el club leiotarra, que contó todos sus partidos como derrotas excepto uno, un empate a 9 ante el Zaragoza con el que se despidió de la máxima división. Así que el equipo vizcaino solo aguantó una temporada en Honor. Pero qué temporada. Fue un curso histórico e increíble que sueña con volver a repetir. Por ello, el Leioa WLB ya trabaja en su nueva campaña en Primera División, la segunda categoría estatal; y lo hace, además, cerrando un ciclo. Sin dos pesos pesados del equipo. Sin Jon López, su entrenador los últimos 16 años; y sin Virginia Cobos, capitana en el periplo por Honor y con un bagaje de 12 temporadas en Sakoneta.

Fue Cobos la primera en anunciar su marcha del club. Lo hizo antes de terminar el peregrinaje leiotarra por Honor, por lo que sus compañeras le homenajearon con ese único punto cosechado ante el Zaragoza. La capitana decidió colgar el gorro tras una campaña en la que se le hizo muy complicado compaginar la vida laboral con la exigencia de ser deportista de alto nivel y en la que, encima, tuvo que hacer frente a una lesión en la mano que la tuvo dos meses alejada de las piscinas. “Ha llegado el momento. Le he dado todo lo que podía dar al deporte y al equipo; y también creo que el deporte me ha dado ya todo lo que me podía dar. Además pienso que es un buen momento y muy bonito porque es un cambio de ciclo. En mi último año la oportunidad de vivir la División de Honor ha sido enorme, muy especial”, explicó la ya exjugadora.

Y es que Cobos vivió el mejor momento del Leioa WLB, pero también sabe lo que es descender a la Liga Euskal Herria. Porque sus 12 años en Sakoneta han dado para mucho. “El hecho de haber jugado tantos años en el mismo equipo es bastante significativo. Es el resultado de que realmente he creído y sigo creyendo en el equipo y en el proyecto. Formar parte de esta familia me ha hecho realmente feliz y me va a seguir haciendo, porque de una manera u otra voy a seguir formando parte del equipo, aunque sea en la distancia”, razonó la de Santutxu.

El mismo camino que Cobos su siguió entrenador López. El técnico decidió cerrar un capítulo de 16 temporadas sentado en el banquillo de Sakoneta para “ver el waterpolo desde otro punto de vista”. Y es que el míster vizcaino aterrizó en Leioa en septiembre de 2005 y desde entonces dirigió al equipo en una campaña en División de Honor, diez en Primera División y cinco en Liga Euskal Herria. Es decir, disfrutó del histórico ascenso a la élite del waterpolo estatal, pero también de las promociones a Primera División de los años 2009 y 2011. “Pero esta no es una historia de resultados, es la historia de un camino de 16 temporadas en las que hemos aprendido a andar pasito a pasito, sin prisa, pero sin ponernos ningún techo porque empezamos abajo, lo más abajo posible; y con casi todo en contra, conseguimos llegar a lo más alto”, dijo López. Y ahora, tras haber estado en lo más alto, el técnico necesita parar. Respirar fuera del agua. “Ser entrenador de un equipo con la pasión, el corazón y la fe del Leioa exige estar a la misma intensidad y ahora el cuerpo me pide un poco de distancia. Coger aire y aportar desde donde creo que puedo ser mucho más útil”, reconoció. Y ese lugar, para López, ya no es el banquillo de Sakoneta.

Ambiciosos

A pesar de dejar el equipo como jugadora y míster, Cobos y López dicen que siempre serán del Leioa WLB. Por ello, ambos son ambiciosos y creen que el conjunto vizcaino tiene mimbres para volver a la élite del waterpolo. “No sé si será la próxima temporada, pero tengo claro que vamos a volver a la División de Honor. El equipo es bastante joven y todavía queda mucho margen de mejora. Somos un equipo de cantera y joven, con jugadoras que han crecido mucho, pero aún crecerán más porque todavía tienen muchas sorpresas que dar. Así que no tengo ninguna duda de que volveremos, lo haremos más fuertes y con más confianza”, concluyó Cobos.

Jon López termina un capítulo de 16 temporadas en el banquillo del Leioa para “coger aire y aportar desde puedo ser más útil”

Tras 12 cursos en Sakoneta, Cobos cuelga el gorro con la satisfacción de haber podido jugar en División de Honor con el equipo