El Lointek Gernika Bizkaia abandona por un fin de semana su refugio de Maloste para mostrarse en ese escaparate de lujo que es la Supercopa. Los cuatro mejores equipos de la última Liga Femenina comparecen en el nuevo formato de la competición y el equipo gernikarra está entre ellos, algo que conviene subrayar todas las veces que haga falta. El Bilbao Arena, por el que han pasado tantas estrellas, recibe ahora a varias de las mejores jugadoras de Europa. El recinto de Miribilla habría podido ser una gran caja de resonancia para el baloncesto femenino, pero la maldición de estos tiempos ha dictado otra cosa.

No habrá público, o será muy escaso. Será una Supercopa con la marea granate ausente, comiéndose las uñas en Gernika mientras su equipo pelea con rivales del máximo nivel. "Es lo que más pena nos da de todo", reconoció ayer en el encuentro con los medios Gerardo Candina, el presidente de un club que combina la "muchísima ilusión" y la resignación porque la pandemia ha estropeado lo que tenía que ser una fiesta, "en la que podíamos haber metido cuatro o cinco mil espectadores". La normativa del Gobierno Vasco dicta que solo puede haber 600 personas en Miribilla, incluidas todas las involucradas en el evento, así que quedarán muy pocas localidades disponibles. "Hay muchísimos aficionados que me están preguntado cómo conseguir entradas, pero va a ser prácticamente imposible atender a todos. La situación es la que es y llegamos donde podemos. Eso es lo que nos fastidia, aunque estamos orgullosos de estar aquí", añadió Candina.

En el aspecto deportivo, está claro que el reto para el Lointek Gernika es enorme, "aunque si hay un momento para poder sorprender a estos equipos es ahora ya que todos estamos en construcción. Solo pensamos en el Valencia, que bastante es, y lo que pase después nos da igual". Mario López confía en su equipo "que está en crecimiento en las dos últimas semanas" y que se ganó estar en la Supercopa "con una temporada espectacular". "Para nosotras es un gran logro después de todos estos años en la Liga Femenina. Hay que aprovechar la ocasión, disfrutar sin presión, intentar que la afición disfrute y jugar nuestras armas durante el partido si tenemos posibilidad", comentó. Su cuerpo técnico no ha podido acceder a los vídeos de los dos amistosos que ha jugado el Valencia por lo que "tendremos que pensar más en nosotras que en lo que pueda hacer el rival a nivel táctico".

Las jugadoras del Valencia son sobradamente conocidas por lo que el técnico gernikarra aseguró que será clave "mantener durante más tiempo la solidez defensiva que mostramos a ratos en la Euskal Kopa. Es clave porque también tuvimos problemas de anotación". "Nuestras jugadoras se están conociendo, hay algunas que están mejor físicamente que otras, pero creo que podemos hacerlo bien. Hay cosas innegociables en nuestro estilo, pero hay que adaptarse a las jugadoras que tenemos", señaló Mario López tras una pretemporada que "está siendo convulsa por todas las medidas que hay que guardar, aunque a la hora de entrenar está siendo como siempre. Hay que adaptarse porque puede ir para largo y puede haber continuos cambios".

Promesa de esfuerzo

Promesa de esfuerzo

Naiara Díez también aguarda la Supercopa con mucha ilusión tras ocho temporadas en el club en las que no ha dejado de crecer y superar hitos: "Esto es otro paso más para Gernika, para Lointek, para el club, para las jugadoras, de hacer todo un poco más grande. No podemos prometer resultados, pero sí trabajo y esfuerzo para que la gente siga estando orgullosa". En teoría, el Lointek Gernika parte como víctima de tres equipos acostumbrados a estas lides, pero "llegamos sin miedo y con ganas de jugar lo mejor posible, sabiendo la dificultad que tiene enfrentarse a los tres equipos con los presupuestos más altos de la Liga Femenina". La capitana del Lointek Gernika también lamentó la ausencia de público por una situación "que está presente a nivel mundial y que nos afecta a nosotras porque nos obliga a extremar los cuidados".

El equipo vizcaino está aún en fase de acoplamiento "y cada semana vamos mejorando en intensidad y conceptos. Las nuevas se van amoldando a lo que quiere el entrenador y la química en el grupo está siendo muy buena. Nos falta tiempo de entrenamiento, pero la Supercopa ya está aquí y vamos a por todas". Es la huella del Lointek Gernika Bizkaia, que también quiere dejar grabada en esta Supercopa que quiere dedicar a esa marea granate ausente por imperativo legal.