Carlos Rodríguez apura con Kaiku una pretemporada distinta y tocada por el coronavirus covid-19.

¿Qué tal ha sido la vuelta a los entrenamientos en el agua?

—Entre que faltaban los gallegos y todo lo demás, la verdad, ha costado hacerse, pero era una cosa esperada. Es normal que después de casi tres meses haya mucho trabajo por hacer. Por lo menos está la gente con ganas y eso es lo que cuenta.

Motivación no faltará.

—No, los remeros ya tenían ganas de olvidarse del ergómetro y ahora en el agua se sienten mejor. Ahora llegan los problemas de manos, es algo que toca esta semana. Esperemos que no se compliquen y podamos entrenar con normalidad.

Mucho trabajo en poco tiempo.

—Sí, está claro. Físicamente han llegado bien porque han estado con el ergómetro, pero ahora hay que acoplar ese físico a la trainera, conseguir que el barco vaya rápido, coger ritmo… Son muchas cosas en poco tiempo, pero estamos todos los equipos igual.

¿Cuáles han sido las altas y las bajas para esta temporada?

—Todavía tenemos opción de hacer las listas y puede haber algún cambio, porque estamos con un par de remeros en duda. Con respecto a la plantilla del año pasado, tenemos cuatro bajas del equipo titular. Dos canteranos, un guipuzcoano y un gallego. Luego, las altas son David Camacho y Óscar Gómez, que vuelven; Beñat Apraiz y Jon Carrillo, que vienen de Ondarroa; Manuel Gutiérrez, que llega de Castro, y Roberto Pérez, de Astillero.

¿Ha mejorado la plantilla con respecto al curso pasado?

—Tenemos un equipo que físicamente seguramente sea mejor, pero está menos acoplado y tiene algo más de peso. El problema del acoplamiento lo tendrán todos los equipos y cuantos más remeros nuevos tengan, más problemas habrá para acoplar todo. La idea es avanzar un poco más con respecto al año pasado, pero nos va a costar debido al hándicap de unir a la gente. Aunque si salen bien las cosas en estas tres o cuatro semanas, podemos estar un pelín mejor que el año pasado. Aun así, vamos a ciegas.

¿Qué objetivos se marca para esta Eusko Label Liga?

—El objetivo es estar en la segunda tanda y así no pasar apuros, pero luego ya veremos. Al no haber hecho las pruebas que se hacen entre abril y mayo, en las que se evalúa la velocidad del barco y se ve dónde se puede estar, ahora mismo no sabemos realmente dónde estamos. Por cómo andábamos el año pasado y la gente que tenemos, creemos que podemos estar en la segunda tanda, ese es el objetivo. Luego ya nos pondrá el agua en nuestro sitio.

Otro paso más hacia la consolidación del proyecto de Kaiku.

—La idea era esa: ir creciendo poco a poco. Si el año pasado fuimos novenos, ahora toca mejorar ese puesto. Esa es la idea que tiene el club. Luego, intentaremos que vayan saliendo chavales. Así, tratar que con los más jóvenes y los fichajes se pueda subir un poco el nivel del equipo.

¿Cómo ve a esos jóvenes remeros que tratan de hacerse un hueco en el ‘trece’ titular?

—Queda trabajo. Los que ya han remado el año pasado van evolucionando, pero la mayoría tienen 21 años y todavía les queda mucho recorrido. Todavía les queda para llegar al nivel que pretendemos en Kaiku. Pero si mantienen esta progresión, en dos o tres años, creo que serán remeros de calidad ACT. La pena es que dos canteranos del año pasado, que eran titulares, lo han dejado y eso te hace plantearte muchas cosas. Estás apostando por los chavales y luego, entre estudios y trabajo, nunca sabes por dónde pueden salir.

Este curso muchas miradas estarán puestas en las dos últimas posiciones.

—Está claro que, con el hándicap que hemos tenido todos, esto es una papeleta buena. No sé si en el resto de los equipos siguen todos los remeros o alguno se ha marchad; además, nadie está exento de poderse contagiar. Para los equipos que no peleamos por la liga, lo mejor es librar la temporada y ya está. Para los equipos un poco más humildes esta liga puede ser muy complicada.

¿Ve algún candidato claro a estar abajo?

—Con este problema, por debajo puede acabar cualquiera. Parece que Ondarroa no ha acusado las bajas y está bastante bien y Cabo ha fichado un par de remeros y parece que va a subir el nivel. Como siempre, los recién ascendidos, más Lekeitio y nosotros somos los que trataremos de no estar ahí y, hasta que no demostremos lo contrario, seremos esos cuatro los candidatos.

¿Y para pelear por la Corona?

—A los equipos de los últimos años. Quizás Zierbena, que ya estuvo el año pasado, puede ser uno de los favoritos junto a Santurtzi, ya que los dos han hecho buenos fichajes. Hondarribia está ahí y Orio también, que es el ganador del año pasado. Luego hay que ver cómo se acoplan en Bermeo al nuevo entrenador y creo que Donostiarra también estará en la pelea. Al final son esos seis. De cara a la tanda de honor, veo a Zierbena, Santurtzi, Hondarribia y Orio, aunque también creo que Bermeo tiene calidad para estar ahí arriba.

“Por cómo andábamos el año pasado y la gente que tenemos, creemos que podemos estar en la segunda tanda”

“La tripulación ha llegado bien físicamente porque ha estado con el ergómetro, pero ahora hay que acoplar ese físico a la trainera”