bilbao - Si dura fue la derrota de la selección española en Zagreb frente a Croacia peor ha sido el escarnio posterior. O por lo menos eso ha pretendido el defensa central Dejan Lovren, quien se jactó a través de las redes sociales del codazo que propino a Sergio Ramos durante el partido de la Liga de Naciones, disputado el jueves en el estadio Maksimir (3-2).

El central sevillano no es precisamente una alma de la caridad, pero al menos cuida las formas una vez acabado el partido. “Le he matado con el codo, ¡sal ahora en rueda de prensa a hablar!”, dijo el defensa del Liverpool dirigiéndose entre risas a Ramos mientras miraba a la cámara de su móvil, un momento que después subió a su cuenta oficial de Instagram. Lovren adornó su bellaquería subiendo una foto donde se recoge el codazo a Ramos, que se queja del golpe en el salto, y un mensaje: “Buenos días Croacia”.

Lovren completó su antología con una exacerbada exhibición nacionalista, calificando a los jugadores de Luis Enrique de “montón de cobardes” y señalándose la bandera de Croacia que lucía en la camiseta mientras, a la vez que tapaba la española, añadía: “Son una banda, solo vale nuestra bandera, la suya se apaga. Sólo este escudo es digno”.

Si bien difícilmente se puede entender semejante animadversión hacia la selección española, sobre Sergio Ramos sí que hay pistas: la pasada final de la Liga de Campeones, que el Real Madrid ganó al Liverpool en Kiev (3-1). El partido estuvo muy mediatizado por la lesión a la media hora de Mohamed Salah, la estrella y goleador de los reds, a quien el capitán madridista agarró del brazo para forzar su caída, dislocándole el hombro derecho y forzando su salida del partido. Por si fuera poco, al día siguiente las redes sociales se hicieron eco de una secuencia del partido que casi pasó desapercibida durante su disputa: el central sevillano, en un encontronazo, golpeó la cabeza de Loris Karius. El portero alemán se quejó al árbitro de la acción, ocurrida en el minuto 49. Acto seguido, Karius entraba en la historia futbolística de las calamidades regalando el primer gol a Benzema, un error provocado, supuestamente, por el golpe recibido que le había dejado aturdido.

Lovren, que el jueves ganó a Ramos por primera vez después de seis enfrentamientos directos, ya mostró una inquina pueril, quizá envidia, hacia el futbolista madridista en una entrevista concedida hace dos semanas “Ramos tiene muchos más fallos que yo... pero juega en el Real Madrid. Cuando comete un error, gana por 5-1 y a nadie le importa. Cuando yo fallo, es 1-0 y el choque se acaba. Tengo mala suerte con eso”. Lovren añadió: Varane es mejor que él. Ganó la Champions y el Mundial de Rusia. Debería ser el mejor defensor del mundo y eligieron (la FIFA) a Ramos”.

la mala fama Desde el episodio con Salah, el capitán del Real Madrid ha incrementado su fama de marrullero y eso le está procurando el rechazo de los aficionados rivales en muchos estadios europeos. Durante el encuentro frente al Viktoria Plzen, el pasado 7 de noviembre, Ramos estampó su codo contra la nariz de Havel provocándole una fuerte hemorragia que le obligó a dejar el terreno de juego. Como en la Champions no hay VAR, el defensa andaluz se libró de la expulsión, pero no de incrementar su mala fama.

Ramos regresó ayer en un vuelo privado desde Zagreb para ser examinado por los doctores del Real Madrid de una molestia en la “zona más próxima de la zona aductora cercana a la inserción con el pubis”, informó la Federación Española de Fútbol.