Bilbao - Pere Tomàs se convirtió ayer en el primer rostro novedoso del proyecto del RETAbet Bilbao Basket para el curso 2017-18 en pisar suelo vizcaino. El alero balear aterrizó en la mañana de ayer en Loiu, por la tarde visitó el campus oficial del club en Miribilla, esta mañana tenía previsto pasar el pertinente reconocimiento médico y por la tarde será presentado ante los medios de comunicación. En sus primeras declaraciones como hombre de negro, Tomàs admitió que se sintió feliz en el momento en el que conoció el interés de la entidad de Miribilla por hacerse con sus servicios: “Es bueno que un club como Bilbao Basket se fije en ti. He firmado por tres años e intentaré aprender lo máximo y seguir mejorando. Siempre me he fijado en Álex Mumbrú como jugador, actúa en mi posición y siempre he intentado aprender de él. Jugar y compartir vestuario con él va a ser muy positivo para mí”.

El exjugador de Joventut, Zaragoza y Manresa, donde militó el curso pasado, escurre el bulto cuando se le pide que se defina como jugador, aunque sus palabras derivan hacia la tipología de jugador de equipo. “No me gusta mucho hablar de mí como jugador, es mejor que lo hagan los que entienden. Intento darlo todo, esforzarme al máximo y ayudar al entrenador en todo aquello que necesite”, destaca. Precisamente, la figura del técnico, Carles Duran, ha sido uno de los motivos por los que Pere Tomàs decidió recalar en el Bilbao Basket: “Que sea Carles el que lleve el proyecto me ha ayudado mucho a tomar la decisión. Es un entrenador que me conoce desde que llegué a Badalona con 13 o 14 años y eso ayudó a la hora de dar este paso. Sé que es un entrenador muy exigente que siempre quiere que el equipo esté al máximo y espero ayudar para conseguirlo”.

Entre los primeros deseos de Tomàs en esta nueva etapa está explorar Bilbao, ya que “he venido muchas veces aquí a jugar partidos pero nunca he tenido la oportunidad de conocer la ciudad bien y tengo muchas ganas de hacerlo, de dar una vuelta y conocer los sitios. Tengo ganas de que todo empiece”. - J. Larrauri