BILBAO. El plazo de tres días hábiles que concede el reglamento para que Berasategui presente una petición de contraanálisis concluye mañana, martes.

Caso de no acogerse a esta vía, automáticamente se formalizaría el positivo, que podría dar lugar a una sanción máxima de dos años.

Entonces, la autoridad federativa vasca comunicaría el resultado del control antidopaje y la correspondiente sanción impuesta a la Federación Internacional de Triatlón (ITU, en sus siglas en inglés), al Consejo Superior de Deportes, a la Comisión Nacional Antidopaje y a la Federación Española de Triatlón.

También se notificaría a las federaciones nacionales de los deportes que se practican en el triatlón, es decir, los que rigen la natación, ciclismo y atletismo en el Estado.

No obstante, Berasategui podría acogerse a la vía judicial a la búsqueda de irregularidades del proceso de control de su orina, bien en el transporte o en la custodia de las muestras tomadas en Bilbao tras la competición del 18 de mayo.

El Gobierno vasco, que tiene competencias expresas, viene llevando a cabo a través de sus servicios médicos numerosos controles antidopaje durante este año buscando limpieza en el deporte.

Lo hizo en el Bilbao Triatlón y, con anterioridad, en los duatlones de Arrigorriaga y Oñati, entre otros.