La conexión entre Marta Pombo y Bizkaia va mucho más allá de las visitas esporádicas. Desde que mantiene una relación con el bilbaino Luis Zamalloa, la influencer madrileña ha hecho del norte su segunda casa.
En cada escapada, comparte con sus seguidores momentos que combinan paisajes espectaculares, planes familiares y sobre todo, una fuerte devoción por la gastronomía vasca. En esta ocasión, uno de los lugares que más ha llamado la atención de sus seguidores ha sido un restaurante: el Asador Borda, situado en Getxo.
Un asador con esencia local
El Asador Borda, ubicado en Getxo, es un claro ejemplo de cómo la tradición puede convivir con una presentación cuidada y una experiencia completa. Su filosofía es sencilla pero efectiva: recorrer kilómetros para encontrar los mejores productores locales, apostar por el producto de temporada y elaborar platos con raíces tradicionales. Esto se traduce en una propuesta gastronómica honesta, sabrosa y cercana, donde cada ingrediente tiene un propósito y una historia.
La decoración rústica y elegante acompaña a la perfección una carta que respeta el sabor original de las materias primas. En este asador no se buscan artificios, sino que se potencia el gusto real de cada plato. Los clientes valoran no solo la calidad, sino también el mimo en los detalles: desde la atención del personal hasta la presentación de cada elaboración. No es de extrañar que Marta Pombo lo haya elegido como uno de los puntos clave en su última visita a Bizkaia.
Los detalles de su escapada en Instagram
Marta Pombo no ha pasado desapercibida durante su reciente escapada a Bizkaia. A través de su perfil de Instagram, donde acumula cientos de miles de seguidores, ha compartido un carrusel de imágenes que narran su paso por el norte. En ellas, se la puede ver paseando por las calles del centro de Bilbao, fotografiando un coche antiguo decorado del Athletic, visitando el Guggenheim e incluso disfrutando de los paisajes costeros, pese a que la lluvia estuvo presente en varios momentos del viaje.
Entre estas instantáneas, destaca una tomada en el Asador Borda, donde muestra la carta del restaurante. Aunque no ha detallado el menú, sus seguidores no han tardado en elogiar la elección y preguntar por la ubicación exacta.
Su vínculo cada vez más fuerte con Euskadi
Aunque Marta Pombo nació y creció en Madrid, su conexión con Euskadi ha ido creciendo con los años. El vínculo sentimental con su marido ha sido el motor inicial, pero lo que ha consolidado su amor por esta tierra ha sido la experiencia personal. Marta no solo repite escapadas, sino que en cada una muestra un mayor conocimiento y afecto por la cultura, la gente y los paisajes de Euskadi.
En más de una ocasión ha declarado lo mucho que le gusta perderse por las calles de Bilbao, disfrutar de sus tradiciones y vivir ese equilibrio entre mar, montaña y ciudad que tan bien define a la zona. En verano, en otoño o en plena primavera, Bizkaia se ha convertido para ella en una especie de refugio personal, lejos del bullicio de la capital.
Su dulce vasco favorito
Si hay un detalle que Marta Pombo no deja de repetir en sus visitas, es su debilidad por uno de los dulces más icónicos de la repostería vasca: el bollo de mantequilla. En varias ocasiones ha compartido en stories o publicaciones lo mucho que le gusta este clásico bilbaino, una pequeña delicia elaborada con masa tipo brioche y un relleno suave y cremoso de mantequilla.
Lejos de productos de moda o postres sofisticados, este bollo representa lo que más aprecia de la gastronomía del norte: la sencillez bien ejecutada, los sabores que conectan con la infancia y ese toque local que convierte lo cotidiano en especial. Para Marta, no hay visita completa a Bizkaia sin pasar por alguna pastelería a disfrutar de este pequeño placer.