El coleccionista de txapelas

bilbao

Espidifen antes de salir a la cancha y listo", dice Eneko Yoldi (Huarte, 11-X-1988). Así saltó al frontón de Lezama el viernes, porque la gripe ya empezaba a hacer acto de presencia y la fiebre subía y subía. La final del torneo vizcaino mostraba los dientes con Jaka y Tolosa, dos de las perlas de Aspe, sacando músculo. Mientras, el delantero navarro sufría los rigores de la malencarada enfermedad que le tiene aún en casa, con décimas, malestar general y demás síntomas. "Fue un encuentro duro, porque jugué ya fastidiado. Gorriti hizo un partidazo, jugó mucho. También Tolosa, aunque Jaka quizás se precipitó un poco", relata el delantero, quien lleva en el club Huarte toda la vida. Así, las cosas salieron a pedir de boca y con 22-12, Eneko y Gorriti se calaron la txapela lezamarra ante dos jóvenes que vienen pegando fuerte. El delantero fue protagonista al ser nombrado mejor jugador del torneo.

Su huracanada historia semanal empieza cuatro días antes, el martes, cuando Eneko descalabró a Ansotegi en la final del torneo Soraluze en Bergara dentro del Cuatro y Medio. 22-5. El jueves volvió a coger camino a Gipuzkoa para aparcar su coche -"en tres años ya le he hecho más de 80.000 kilómetros"- en Zumarraga. "Perdimos en las semifinales", añade. Estaba Eneko con Linzoain y no pudieron ganar. 22-15 contra Arrieta-Telletxea. Un día después, y con la temperatura corporal ascendiendo como un ciclón, Eneko ganó en Lezama. Dos txapelas en cuatro días. "Ha sido una semana ajetreada, sí", comenta el de Huarte, que no pudo jugar contra Bizkaia en el Gravn por la gripe.

Pero lo sorprendente del navarro es su palmarés, con una cantidad de txapelas inmensa, solo al alcance de muy pocos pelotaris, tanto en el campo aficionado como en el profesional. "He ganado dos veces el de Soraluze, dos en Lezama, tres el DV, tres campeonatos de España, una en Zaldibar, dos el Gravn, cinco veces el torneo de El Antiguo -entre parejas y Cuatro y Medio-, una vez en Elgeta, la Copa del Rey...", enumera Yoldi. Y cuenta que "con la primera tienes mucha ilusión, pero lo más difícil es mantenerse. Es complicado estar motivado continuamente, seguir entre los mejores y sumando. Pero a mí me gusta muchísimo la competición, es lo que me llena, me gusta jugar, y jugar a pelota a mano me encanta. Llevo haciéndolo toda la vida y es muy importante para mí". Le motiva a Yoldi estar en el candelero y saltar a la cancha. No en vano, suma al año de media alrededor de cien partidos e, incluso, en 2010 alcanzó la cifra de 110.

Su palmarés es impresionante, y también que las grandes empresas de pelota a mano, Aspe y Asegarce, no hayan hecho una oferta en firme para que dé el salto a profesionales. "Nunca he tenido una oferta sobre la mesa, aunque sí que he ido a entrenar, y si no me la han hecho habrá que preguntárselo a ellos. Pero no me como la cabeza con eso, sigo a lo mío, a jugar y a disfrutar", analiza y apostilla que "para mí no es una espina clavada el no debutar. Lo mío es jugar y me llevo muchas cosas. Tengo la suerte de que me llaman para la mayoría de torneos y he hecho un montón de amigos. No obstante, mantenerse como puntero tiene su mérito, porque viene gente de abajo, jóvenes, con mucha ilusión y ganas, como Jaka o Tolosa, y dan guerra".

del trabajo al partido El salpicadero de Yoldi se asfalta entre la empresa de fontanería de Iruñea en la que trabaja y las tardes de frontón. "Tengo la suerte de trabajar de fontanero y que mis compañeros me permiten salir antes para jugar", sostiene Eneko. Así, sale de currar, rápido a por el coche y al frontón. "Sales de trabajar, vas a jugar, llegas tarde a casa, duermes poco y a trabajar otra vez. Pero al final llegan los resultados y te llena mucho", remacha el delantero.

resultados del gravn Bizkaia ganó en el resultado global de la primera jornada del Gravn a Nafarroa en casa 20-17. Los visitantes triunfaron en doce de los enfrentamientos en pared izquierda, mientras que los manistas vizcainos solamente ganaron diez encuentros. No obstante, en trinkete, la selección de Bizkaia obtuvo buenos frutos al ganar diez de los quince envites disputados. En el otro duelo, Gipuzkoa se impuso a Araba por 21-8.