El himno ‘Stand by Me’ cumple 65
Tal día como hoy se grabó la mítica canción de Ben E. King, una de las más importantes de la historia del pop y versionada en numerosas ocasiones
Tal día como hoy, un 27 de octubre de 1960, el estadounidense Ben E. King grabó el clásico eterno Stand by Me, una canción sobre la necesidad de apoyo en tiempos de adversidad que cumple su 65º aniversario y es ya, por derecho, repercusión y emoción, una de las mejores canciones de todos los tiempos.
Lo prueban los múltiples y variados cantantes y grupos que la han versionado, de Adriano Celentano a John Lennon, pasando por Otis Readding, Florence + The Machine, Paloma San Basilio, El Dúo Dinámico, Weezer, KC & The Sunshine Band o Willy de Ville, entre otros.
Una sentida petición de ayuda y solidaridad. Eso es Stand by Me, la canción que Ben E. King grabó hace hoy justo 65 años tras ahondar en las influencias del gospel para crear un clásico de la canción popular de todos los tiempos asentada sobre su voz sedosa, el lirismo orquestal y ese bajo impresionante que introduce el tema.
King creó la canción junto al fructífero dúo de compositores y productores formado por Jerry Leiber (letras) y Mike Stoller (música), autores de clásicos como Hound Dog, Jailhous Rock, King Creole, Poison Ivy o There Gos My Baby, aunque usando el seudónimo de Glick. Ambos produjeron el sencillo, adaptado a partir de un tema de raíz gospel.
Cuenta la leyenda que durante la composición de Stand by Me, Ben E. King no tenía la intención de interpretarla ni grabarla, sino cedérsela al grupo The Drifters, otro clásico soul de los 60 que tiene en su repertorio canciones como Under the Boardwalk, Save the Last Dance for Me y This Magic Moment. Al parecer, su mánager la rechazó y King acabó por incluirla en su tercer disco, Don't Play That Song!, publicado por Atlantic Records en 1962.
Entre las mejores de la historia
La canción ascendió en las listas de ventas en 1961 y repitió en 1986 al formar parte de la banda sonora de la película Cuenta conmigo. Ocupa el puesto 25 del listado de los 365 canciones del siglo compilado en 2001 por la Recording Industry Association of America (RIAA) y National Endowment for the Arts, y el 121 de la lista de las 500 mejores canciones de todos los tiempos, elaborada por la revista Rolling Stone. Además, BMI nombró el tema como el cuarto tema más interpretado durante el siglo XX, con más de siete millones de interpretaciones.
Versiones
La importancia de la canción de Ben E. King resulta evidente si se rastrean las multitud de versiones realizadas en el último medio siglo en distintos idiomas y estilos musicales.
En 1963 es interpretada por el italiano Adriano Celentano, bajo el título de Pregherò (rezaré). El español Bruno Lomas se la ‘copió’ una década después
Otis Readding realizó su versión en el disco Pain in My Heart, editado en 1964.
John Lennon la traspasó a lenguaje rockero y eléctrico en el disco de versiones que publicó en los 70 tras la disolución de The Beatles. El disco se tituló Rock´n´Roll y se publicó en 1974.
Entre las versiones curiosas en castellano destaca la de los sevillanos Silvio y Sacramento, la realizada por Paloma San Basilio, la del latino Prince Royce (a medias en inglés) y la de El Dúo Dinámico, que salió al mercado como Rogaré en 1993.
Willy de Ville fue el líder de los magníficos y nuevaoleros Mink Deville, que siempre tuvieron querencia por los aires latinos, del blues y, sobre todo, del soul de los 60. Ya en solitario, como pudimos escuchar en un concierto en Bizkaia, solía interpretar su emotiva versión.
Y como curiosidad, la escuchamos trasladada a los sonidos dance y bailables de KC & The Sunshine Band, grupo que se hizo popular con pelotazos disco funk como Give It Up y Boogie Shoes.