Hay artistas que se ponen delante de un lienzo, otros modelan con sus manos el barro, pero para Eva Mena su soporte es la arquitectura urbana. Durante varias semanas, los transeúntes que pasaron por el BilboGarbi, el servicio de Limpieza y recogida de residuos del Ayuntamiento de Bilbao en Elorrieta, vieron trabajar a esta bilbaina con sus sprays, dando rienda suelta a su creatividad en esos 200 metros cuadrados de pared.  

El arte urbano en Bilbao destaca por la cantidad y la calidad de las obras que adornan algunos de sus rincones y fachadas; el área de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala no tienen nada que envidiar a otras zonas de ciudades como Berlín, Londres o Bruselas, consideradas las grandes mecas del arte urbano mural internacional. La mayoría son intervenciones impulsadas por el Ayuntamiento de Bilbao y otras instituciones, dentro de la estrategia de revitalización y renovación de la ciudad. 

A la gran variedad de murales que existen en la capital vizcaina, se une desde hace unas semanas uno realizado por Eva Mena, un encargo del Ayuntamiento bilbaino que tiene como objetivo transmitir el mensaje de la importancia del reciclaje y la reutilización en esta zona de Elorrieta. “He querido lanzar un mensaje positivo. No hay un planeta B, no hay un plan B, pero estamos todavía a tiempo. Por eso, he incluido en el mural niños cuidando las plantas y una niña que lleva el símbolo del reciclaje mientras sujeta el mundo. En el Ayuntamiento me han dado mucha libertad y este mural es muy mío. A mí me encanta pintar retratos y aquí los hay”.

Una persona pasa por el mural de Eva Mena. Oskar Gonzalez

Eva confiesa que le gusta trabajar en la calle: “Tiene sus ventajas, sobre todo, el trato con la gente de a pie, del barrio. Además, el hecho de ver el proceso de cómo se ha ido creando este mural ha hecho que lo sientan más suyo”, explica esta artista, especializada en muralismo de exterior e interior, que tiene también más obras en Bilbao. Ha pintado el mural de la antigua estación de tren de Mallona, algunos depósitos de agua... También ha realizado obras en compañía de otras mujeres artistas (raperas, DJs) en lugares tan divergentes como Brasil y Marruecos. 

Desde luego, que mi trabajo varía, afortunadamente, hacia terrenos diversos, que me aportan libertad, creatividad y socialización, pero si alguien me pregunta ¿qué haces?, le contesto murales pintados en paredes. Creo que es una respuesta razonablemente concisa”, asegura Eva Mena, que estudió Bellas Artes en la UPV y estuvo becada también por BilbaoArte en 2005. Pero su pasión por pintar con spray surgió mucho antes. “Anteriormente, estudié diseño gráfico y ya estaba ya en el mundillo del arte urbano y el muralismo”. 

Obras con mensaje

¿Puede haber un mayor canal de comunicación que la calle para expresarse libremente y crear un diálogo con el público? “Es una pregunta que me hicieron hace poco y me gustó porque partió de un adolescente. Me preguntó que si aparte de estética, mis obras tenían mensaje y realmente sí lo tienen. Siempre hay detrás algo, todo tiene un porqué. Transmito mis inquietudes a través de la pìntura en cualquiera de sus formas”.

Esa pasión le ha llevado a tratar de visibilizar a niños y niñas y, sobre todo, a mujeres, que destacan por su activismo y el arte, o las que entre otras facetas, cantan o escriben. “Feministas que luchan por nuestros derechos, que buscan la igualdad a través de su trabajo y cuya obra me resulta inspiradora. Intento muchas veces que no sean mujeres blancas, que sean personas racializadas. Retratar a mujeres es una forma de empoderarnos porque cuando una niña ve a una mujer pintada en una pared provoca un efecto. Empecé no siendo muy consciente de lo que podría llegar a transmitir porque al final era lo que me gustaba, quería representar a mujeres, pero luego he sido consciente del impacto que tiene”. 

Cuando ella empezó había pocas mujeres artistas urbanas. La presencia femenina en el street art era un territorio principalmente asociado al sexo masculino. “Ahora ya hay bastante, al final, cuando una niña te ve pintando, se le enciende un click, se necesitan referentes”, asegura.