madrid - Un nuevo misterio se cierne sobre la aldea de Astérix y Obélix. Alguien ha llegado y el rumor se extiende entre el jefe Abraracúrcix, el bardo Asuranceturix o los dos protagonistas de las aventuras creadas hace 60 años por René Goscinny y Albert Uderzo. No es una nueva aventura de los galos, es Misterio en la aldea, un avance del que será el trigésimo octavo libro de la saga, La hija de Vercingétorix (Anaya), que se publicará en todo el mundo el 24 de octubre y que los fans esperan, como siempre, con gran expectación.

Poco se sabe de la historia que contará La hija de Vercingétorix, más allá de que tendrá una fuerte presencia feminista, con el protagonismo de esa hija del legendario jefe galo, que llegará a la aldea acompañada por dos jefes arvernos. El avance, al que ha tenido acceso en exclusiva Efe en su versión en castellano, son seis pequeñas tiras en las que los principales personajes de las aventuras de Astérix se hacen eco del rumor de la llegada de un personaje conocido a la aldea. Nadie quiere decir en voz alta quién es y hay quien hasta asegura que es la hermana de Cleopatra. Y es solo Idefix, en su lenguaje canino, el que se atreve a gritar que se trata de la hija de Vercingétorix. Unas pocas viñetas que sirven de aperitivo para el nuevo álbum de la serie, realizado por el dibujante Didier Conrad y el guionista Jean-Yves Ferri, que se encargan de dar vida a los habitantes de la irreductible aldea desde hace cuatro números.

feminismo Traducida a más de 20 idiomas y adaptada en más de 120 países, el título y la cubierta de la nueva aventura fueron presentados el pasado mes de abril en el Parque temático Astérix, en las afueras de París, por sus creadores, que avanzaron pocos elementos sobre el argumento. De lo poco que se sabe es que con el personaje femenino que da título al libro se busca representar y “reivindicar el rol de la mujer”, según explicó Ferri en declaraciones a Efe tras la presentación del libro. Y de la protagonista, los autores han dado solo un par de pinceladas. Es una adolescente en plena época rebelde porque “no es nada fácil llamarse Vercingétorix”, aseguran en declaraciones en la web oficial de Astérix.

Por la sombra que se refleja ante los ojos de Astérix y Obélix en la cubierta provisional del álbum, también sabemos que tiene una larga trenza que se recoge en un lazo, que lleva un puñal colgado a la cintura y que muestra una postura desafiante. Frente a ella, Astérix, Obélix cargado con un menhir, e Idefix, que la miran con curiosidad. Es la cuarta vez que una mujer tiene un papel protagonista en las aventuras de los galos, tras Astérix y Cleopatra (1965); Astérix, la rosa y la espada, (1991), con la bardesa Magistra, y Astérix y Latraviata (2001).

nuevos personajes Junto a la joven, aparecerán nuevos personajes, como Selfix y Blinix, dos adolescentes que regresan a la aldea tras finalizar sus estudios y que se harán amigos de la hija de Vercingétorix. Como los arvernos que la acompañan, miembros de las FARC, en un guiño a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, aunque en este caso las siglas responden al Frente Arverno de Resistencia Checreta. Un nuevo álbum que se une a los 37 anteriores, de los que se han vendido 380 millones de ejemplares en el mundo. De la nueva entrega se imprimirán 4,5 millones de ejemplares en sus distintas versiones lingüísticas. Y en cierta forma es un homenaje a los creadores de Astérix y Obélix, que se inspiraron en Vercingétorix para idear al pequeño galo que se sirve de una poción mágica para vencer a los romanos.

Vercingétorix (un líder galo que vivió en el siglo I antes de Cristo) ya apareció en el primer álbum de la serie, Astérix y los galos, entregando sus armas (más bien lanzándoselas) a Julio César, algo que no sucedió en la realidad. Una escena que se recuperará en La hija de Vercingétorix. Pero para saber cómo, habrá que esperar al 24 de octubre.