bilbao- La Fundación Bilbao 700 cerró ayer la XVIII edición del festival Musika Música, dedicado este año a Londres y Nueva York, con cifras récords de público. Y es que cerca de 30.000 espectadores pasaron durante el fin de semana por el Euskalduna para vibrar con los 1.500 músicos que han participado durante tres días en el gran evento de la música clásica. Musika Música 2020 girará en torno a otra ciudad: París.

“El festival ha demostrado que es uno de los acontecimientos culturales más queridos y estimados por el público bilbaino/vizcaino/vasco”, reconoció a DEIA, visiblemente satisfecha, Josune Ariztondo, directora de la Fundación Bilbao 700, entidad organizadora del evento que se ha convertido en uno de los referentes del contexto musical español.

En esta XVIII edición, “donde se ha primado la excelencia de los intérpretes, a precios populares, porque no se trata de hacer caja porque sí, sino de crear afición por este tipo de música entre la ciudadanía y que perdure a lo largo del año”, se programaron cerca de un centenar de conciertos y actividades, que contaron con la asistencia masiva del público.

Así, el programa London-New York, en el que intervinieron reconocidas formaciones e intérpretes a nivel internacional, contaron con el respaldo del público, “que se mantiene en la senda de ediciones anteriores en cuanto a su asistencia y que refleja que la ciudadanía de a pie también admira la música clásica, que ha dejado de ser patrimonio de la elite cultural. A los espectadores de a pie cuando les ofreces una atractiva oferta de música clásica, no se retrae como deja patente Musika Música. Ese es nuestro objetivo que este tipo de música llegue al público general”, explicó la directora de Bilbao 700.

La oferta de conciertos se extendió con generosidad en el Euskalduna. Sus salas se llenaron de música de cámara de Orpheus Chamber Orchestra, el Athenäum-Quartet o el violín de Ana María Valderrama, acompañada al piano por Rosa Torres-Pardo. Otro punto de interés lo pusieron la Sinfónica de Galicia a las órdenes de Rumon Gamba.

Una de las actuaciones más aplaudidas fue la de Juanjo Mena cuando se puso al frente de la Filarmónica de la BBC para dirigir obras de Elgar, Walton y Britten. Tampoco defraudó el pianista Miguel Ituarte, quien ofreció un recital con obras de Copland.

Otros de los principales puntos de interés del Festival los ofrecieron el recital del pianista Josu de Solaun y las actuaciones de la Sinfónica de Navarra y la del Principado de Asturias, así como la Orquesta Sinfónica de Euskadi y la de Camera Musicae, dirigida por Thomàs Grau.

De cara a la próxima edición, tal y como adelantó Josune Ariztondo en la rueda de prensa celebrada ayer por la tarde, la ciudad seleccionada es París. Son cuatro los momentos históricos vividos en la capital francesa los que la convirtieron en centro cultural de primer orden, punto de encuentro internacional al que acudieron artistas de toda Europa al calor de las oportunidades y libertades y los que la convierten en ciudad elegida para Musika Música 2020.

Por un lado, el siglo XVIII, con su música cortesana, el ballet y el pas de basques; en segundo lugar, el siglo XIX, en el que París es destino de artistas europeos, lugar de encuentro de artistas y de músicas (escénica e instrumental); en tercer lugar, la transición del siglo XIX al XX (la Belle Époque) y por último, los siglos XIX y XX desde el punto de vista de Arriaga (1806-1826), Usandizaga (1887-195 ), Aita Donostia (1886-1956) y Guridi (1886-1961).